La educación en Colombia ha sido uno de los sectores en los que se observan diferentes brechas en materia de género, desempeño o incluso en acceso a herramientas tecnológicas.
En el marco de este contexto, la corporación Talentum adelantó el proyecto de educación flexible ‘Universo EducaTIC-vo’ con el que pretende que jóvenes en edades extraescolares de más de 15 años y adultos mayores terminen su educación básica.
Con el programa se han beneficiado más de 40.000 estudiantes de 200 instituciones educativas distritales en territorios urbanos y rurales, en 34 municipios del Valle del Cauca y 41 del Cauca, según cifras de la corporación. Cabe resaltar que el proyecto se ejecuta con financiación de las gobernaciones de los territorios.
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El plan cuenta con seis ciclos, el primero lo oferta el Ministerio de Educación y los siguientes las gobernaciones.
En el caso del Valle del Cauca, la inversión para educar a jóvenes en edades extraescolares y adultos mayores sumó $29.669 millones desde el 2016 hasta el 2022.
Con esto, se puede observar que tras las dificultades económicas que trajo la pandemia para la economía, la inversión en este programa bajó 1,8%, pasando de $7.746 millones en 2020 a $7.599 millones en 2022.
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El año pasado atendieron 7.172 estudiantes y de esos, 2.640 se graduaron como bachilleres. Tal y como lo reflejan las cifras, existe una tendencia al abandono o pausa del programa por los estudiantes inscritos, teniendo en cuenta que más de la mitad no se graduaron.
En ese sentido, el docente Alex Buitrago, docente de la Universidad Externado, pone un foco frente a programas de educación flexible, que si bien ayudan a reducir las brechas de acceso a la educación, deben “generar aprendizajes significativos y conocimiento próximo para que los estudiantes se sientan más motivados a aprender y les sirva para desempeñar en su vida práctica”.
A su turno, Carlos Garzón, economista e investigador en temas de desarrollo, mencionó que “actualmente la tasa de desempleo de los jóvenes fue de 17,9% al cierre de 2022, mientras que la nacional llegó al 10,3%. Esto quiere decir que es casi dos veces más difícil para un joven promedio conseguir un empleo”.
Las dificultades en el sector de la educación han empeorado con la pandemia, porque muchas personas no tenían los medios para acceder a la educación, en especial a nivel rural, según dijo Buitrago.
A su vez, Carlos Alberto Garzón, manifestó que no solo la pandemia deterioró las condiciones educativas, “sino que adicionalmente se ampliaron las brechas urbano-rurales, lo que devela el rezago que hay entre regiones. Parte de la explicación se encuentra en el bajo gasto por persona que el Gobierno genera en educación”.
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Teniendo en cuenta la situación actual en materia de empleo y educación el académico añade que la desigualdad intergeneracional en Colombia está definida en gran parte por el acceso a la educación.
“Estamos viendo que para un joven en rezago escolar, desempleado, es muy difícil que salga de la pobreza”, explicó.
Por otra parte, para el economista este tipo de programas de inserción educativa en los que se logra “adaptar las condiciones educativas de la población en rezago o por fuera del sistema educativo, son totalmente necesarias”.
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A lo que Andrea Escobar, directora de la Fundación Empresarios por la Educación, que estos proyectos educativos permiten desarrollar habilidades para la vida.
El Ministerio de Educación Nacional presentó los cuatro pilares de este tema en el Plan Nacional de Desarrolló que se debe discutir en el Congreso.
Esta bases se basan en el acceso a la educación superior, con la meta de 500.000 nuevos estudiantes; otro de los énfasis es la dignificación de la educación básica, así como la universalización del Programa de Alimentación Escolar (PAE) y alcanzar una educación para la paz.
Adicionalmente, un análisis adelantado por la Fundación Empresarios por la Educación da cuenta de 35 propuestas enmarcadas en esos pilares que presentó el Ministerio, por ejemplo, en relación al cierre de las brechas, se señala la creación de currículos para la justicia social, erradicación del analfabetismo, nuevas evaluaciones, movilización de voluntarios en los territorios y más tiempo en la jornada escolar.
CLAUDIA M. QUINTERO RUEDA
Periodista Portafolio
