Aunque la pandemia trajo consigo una crisis económica, también incidió en la reducción de algunos delitos.
De acuerdo con la Encuesta de Convivencia y Seguridad Ciudadana que publica cada año el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), el año pasado el 7,5% de la población fue víctima de perjuicios asociados a actos delictivos como hurtos, riñas y peleas y extorsiones.
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Esto representa alrededor de 2,9 millones de personas, pero se ubica por debajo de situación prepandemia, en 2019 cuando el indicador se ubicó en 10%, y también frente a 2018, cuando el porcentaje de la población afectada por estas situaciones fue de 15,5%.
“Es intuitivo entender que el hurto a personas y vehículos tiene una reducción significativa por las condiciones que observamos en 2020 por los confinamientos, menor movilidad y una residencia casi permanente en las viviendas desde finales de marzo en 2020. Estas diferencias se vuelven muy profundas en la zona urbana, pero no son tan fuertes en las rurales”, explicó el director del Dane, Juan Daniel Oviedo.
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De estos incidentes, los más comunes son el de hurto de vehículos, que afecta a 4,3% de la población, el hurto a personas (3,2%) y a residencias (1,7%). El Dane también señala el hurto de ganado y otros animales, especialmente en zonas rurales, con 0,9% de la población; extorsiones (1%) y riñas y peleas (0,6%).
Así mismo, cuando la entidad estadística indagó sobre las denuncias, solo 27,1% reconoció haber denunciado, mientras que 72,9% no lo hizo.
Por otro lado, el Dane también preguntó sobre las percepciones de inseguridad de los ciudadanos y en este caso, la encuesta incluye información actualizada a 2021. Mientas en 2019 esta sensación de inseguridad estaba presente en 43,7% de la población, el año pasado se redujo a 39%, pero para 2021 está en 44%.
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“Las personas estuvieron menos expuestas a la inseguridad en la vía pública, en los puentes peatonales o en los centros comerciales, por eso el cambio en la percepción de inseguridad”, aseguró Oviedo.
INCIDENTES DIGITALES
A pesar de que los actos delictivos cayeron, el Dane incorporó también en la encuesta realizada para el año 2020 un sondeo sobre incidentes digitales, que al ser tenidos en cuenta llevan a que la tasa de victimización se incremente, a 8,2% de la población.
Según el director del Dane, esto quiere decir que a nivel nacional 2,1% de la población se vio expuesta a incidentes digitales, lo que implica 582.000 personas.
Por ciudades, aquellas con la tasa de victimización más alta en 2020, incluyendo incidentes de seguridad digital, son Pasto, con una tasa de 21,5%, Bogotá (14,6%) e Ibagué (13%), mientras que Cartagena (4,5%), Barranquilla (5,7%) y Bucaramanga (5,9%) registran las tasas más bajas.
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Así mismo, los incidentes digitales tienen un efecto más marcado en las ciudades que en el campo, mientras que la tasa en las zonas urbanas está en 9,2% para las zonas rurales es de apenas 6,9% de la población.
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