Durante su intervención en la Tercera Cumbre del Sur del G77 + China, que se realiza en Kampala, Uganda, el canciller Álvaro Leyva aseguró que para obtener resultados diferentes en materia de desarrollo, equidad y protección de la vida y el medio ambiente, hay que adoptar acciones diferentes.
“Estamos en una locura colectiva, en la cual esperamos alcanzar un mundo sostenible, reproduciendo unas prácticas que nos están llevando a la destrucción como especie”, dijo.
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Y agregó: “Urge tener un sentido de la realidad: debemos tratar de construir un nuevo consenso mundial a partir de un solo objetivo: la dignidad de la persona humana”.
El canciller invitó a los países que conforman el G77 + China a pensar “un nuevo Bretton Woods y un Plan Marshall que reconozca nuestras fortalezas como sur global, pero también nuestras necesidades”, con un nuevo objetivo que debe ser el del “sostenimiento de la vida y la plena garantía de la igualdad de todos los países y el bienestar de nuestras sociedades. Un nuevo Breton Woods debe contemplar las reglas del nuevo sistema financiero y económico”, puntualizó.
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"Muchos de nosotros, los países aquí presentes tenemos la riqueza de la vida, con esto me refiero a que gozamos de ecosistemas determinantes para mantener la vida en el planeta y gran parte de la fuerza laboral que mueven las economías." pic.twitter.com/uUrTQDcXHj
— Álvaro Leyva Durán (@AlvaroLeyva) January 21, 2024
El ministro de Relaciones Exteriores fue más allá e insistió en la necesidad de fortalecer las acciones de protección de la Antártida, al explicar su relación con la existencia de la Amazonía, así como de las grandes cuencas que conforman el 80 % de las esponjas del mundo: la cuenca del Amazonas, la cuenca de Congo y la de Borneo-Mekong.
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Por último, reflexionó ante los países presentes en la Cumbre en que los actuales conflictos del mundo le han restado tiempo y recursos a la protección de la vida y el planeta. “Lo anterior, mientras que se promueve un modelo económico que cada vez demanda más combustibles fósiles y carbón, el regalo de esta ceguera son los gases de efecto invernadero ¿Y las futuras generaciones qué?”, concluyó el ministro.
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