El anuncio de Cambio Radical de apoyar la reforma tributaria en el Congreso le aseguró al Gobierno, en el papel, las mayorías mínimas para lograr su aprobación.
Pero si el Ejecutivo quiere obtener una votación más holgada y estar más tranquilo, deberá conciliar algunas propuestas al proyecto de ley de otras fuerzas mayoritarias en el Capitolio.
Lea: (¿Recortes tributarios amenazan la calificación de Colombia?)
La reforma tributaria entra a su etapa definitiva en el Congreso esta semana.
Se supo que la idea es elaborar las ponencias para los últimos debates en Senado y Cámara esta semana, anunciarlo el lunes 16 de diciembre y votarlo entre el 17, 18 y 19 de diciembre. Es decir, que habría extras estos tres últimos días.
Lea: (Congreso allana el camino para aprobar la reforma tributaria)
El aire que necesitaba la iniciativa vino de Cambio Radical, cuyo respaldo se oficializó el pasado lunes, tras una reunión entre el presidente Iván Duque y el exvicepresidente Germán Vargas, en la Casa de Nariño.
Luego de ese encuentro, varios congresistas de la colectividad fueron enfáticos en que este respaldo no se daba a cambio de participación en el Gobierno, sino simplemente a que el Ministerio de Hacienda había acogido varios artículos propuestos por esta colectividad.
El acuerdo para que Cambio Radical llegara a la reforma se comenzó a cocinar a principios de noviembre luego de una reunión entre Fuad Char, jefe de la familia Char; Vargas, jefe natural del partido, y el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, en la que estuvieron presentes otros congresistas del partido.
Como se sabe, en Cambio Radical confluyen los sectores de los Char y de Vargas que, en la mayoría de las ocasiones, coinciden en sus posiciones políticas.
LAS CUENTAS
Con el respaldo de Cambio Radical, la iniciativa tendría –en el papel– los votos justos para pasar en Senado y Cámara. Por los lados del Senado tiene asegurados 19 votos del Centro Democrático, el partido de Duque, 14 del Partido Conservador y seis entre los movimientos cristianos Mira y Colombia Justa Libres. Estos cuatro partidos se declararon de gobierno y han sido amigos del Ejecutivo.
A este bloque de 39 apoyos habría que sumar al senador por Mais Jonatan Tamayo, conocido como ‘Manguito’, quien está del lado del uribismo. Ahí irían 40 votos, a los que se adicionarían 16 de Cambio Radical, para llegar a la cifra mágica de 56.
De acuerdo con el reglamento del Congreso, para que este proyecto sea aprobado en el Senado debe alcanzar 55 votos, que es la mayoría absoluta, es decir, la mayor parte de los integrantes de la plenaria.
Este diario supo que, en todo caso, en sectores del Gobierno cuentan con un bloque de al menos siete senadores de ‘la U’ que también acompañarían la iniciativa, lo que, de cumplirse, le daría 63 votos en esta corporación.
En la Cámara de Representantes, entre tanto, las cuentas están más apretadas. Allí, los votos del Centro Democrático, los conservadores y los partidos cristianos (Mira y Colombia Justa Libres) llegarían a 57 y con el refuerzo de Cambio Radical alcanzarían los 87 apoyos, uno más de la cifra mínima para la aprobación de esta iniciativa.
Si algún representante de estas bancadas afines al proyecto se ausenta de la votación en Cámara, estas mayorías comenzarían a descomponerse y el Gobierno tendría que buscar apoyo en ‘la U’ o en el Partido Liberal.
Por los lados de ‘la U’, el representante a la Cámara John Jairo Cárdenas dijo que lo “razonable” es que en el trámite de esta reforma se presenten “las proposiciones a que haya lugar, discutirlas y someternos a la democracia de si son o no aprobadas”.
Y aunque algunos liberales parecen haber desistido de la petición de “suspender” el trámite de la reforma, representantes como Alejandro Chacón, expresidente de la Cámara, han dicho que varias normas del proyecto que comenzarán a regir en 2020 irían “en contra del ciudadano y a favor de las empresas”.
Con este panorama, la reforma tributaria parece estar del otro lado en el Congreso, pero al Gobierno todavía le queda lidiar con otro sector: el de estudiantes, sindicatos y ciudadanos del común que están marchando en varias ciudades pidiendo el retiro de esta iniciativa.
JUAN FRANCISCO VALBUENA G.
Redacción Política
