La epidemia del coronavirus Covid-19 originada en China provocará este año en el transporte aéreo mundial una reducción de ingresos de US$29.300 millones, un 5% menos de los previstos, mientras que la demanda global caerá un 0,6% interanual, informó ayer la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (Iata).
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En su informe preliminar sobre los efectos económicos de la alerta por este brote en la industria aérea, la Iata prevé consecuencias adversas en todas las regiones, aunque Asia-Pacífico será la más afectada, con US$27.800 millones menos de ingresos y una caída de la demanda del 8,2%.
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Norteamérica y Europa serían otros mercados donde podrían darse reducciones de ingresos, aunque sensiblemente menores, que la Iata cifra en US$700 y US$600 millones, respectivamente, aunque se espera que la demanda anual siga creciendo con respecto a 2019.
La epidemia causada por el coronavirus ha dado la vuelta a las previsiones de crecimiento que la IATA publicó en diciembre, en las que señalaba que Asia-Pacífico se mantendría como el mercado de mayor crecimiento, impulsado por la fuerte demanda precisamente de los vuelos internos en China.
Tras la aparición del brote, ahora se espera que en China, país en el que muchas aerolíneas han interrumpido sus vuelos internacionales, los ingresos del sector este año se reduzcan en US$12.800 millones.
Las previsiones se han hecho teniendo en cuenta el impacto que tuvo en el sector aéreo la epidemia de Sars, también originada en dicha nación, en 2003, último año en el que se registró un descenso interanual de la demanda global de transporte aéreo.
“Es prematuro estimar lo que la pérdida de ingresos significará para la rentabilidad global, pues no sabemos exactamente cómo se desarrollará la epidemia y si seguirá el mismo perfil que el Sars”, señaló la Iata. Sin embargo, alerta a los gobiernos y les aconseja que “usen políticas fiscales y monetarias para intentar reducir los adversos impactos económicos” del virus causante de la enfermedad Covid-19.