La empresa Kardex, que apenas lleva unos pocos meses en Colombia, espera llegar a facturar 9,5 millones de euros en América Latina para el año 2021.
Las perspectivas para el 2018 están por los 5 millones de euros en la región, de los cuales este país debería aportar un 15%, según Daniel López, director de Nuevos Negocios de la firma para América del Sur e Iberia.
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En América Latina la empresa está creciendo a ritmo del 25 a 30% anual en los pedidos. Sus principales mercados en el área son Chile, que aportaría este año 1,5 millones de euros, y Brasil, con 1 millón de euros.
Otro gran reto de acá al 2019 es consolidar el montaje de su hub en Colombia –que comenzó a mediados del año pasado– así como abrir dos oficinas más en el área, probablemente en Brasil y Chile, para llegar de manera envolvente hacia los otros mercados de la zona.
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En la actualidad, esta firma de origen europeo dedicada a la automatización y robotización en operaciones logísticas, vende a través de distribuidores en otras naciones de Centroamérica y Suramérica.
“La idea es desarrollar una estructura hibrida, con personal propio junto con canales de distribución”, explicó López.
El directivo añadió que la ubicación inicial de sus oficinas directas en Colombia la decidieron después de los estudios de dos consultoras especializadas, las cuales recomendaron que fuera este el país, tras hacer un análisis macroeconómico y social. Brasil, siendo más grande, no tenía la estabilidad política y económica requeridas.
Otro punto a favor de montar sede acá eran las grandes posibilidades de un sector casi inexplorado. “Es evidente que Colombia está todavía en una fase muy incipiente. Hay una apuesta por la logística tradicional, la de base, aquella en la que las operaciones se soportan con personas y con sistemas muy básicos. Todavía no se ve una gran apuesta en automatización y eso es lo duro porque hay que dirigirse a un nivel que a veces es educativo, pero también esa es la gran oportunidad”, añadió.
Durante este tiempo ya ha hecho contacto con grandes compañías y con otras de menor tamaño, a sabiendas de que el 90% de la infraestructura empresarial en el país corresponde a famiempresas y pequeñas firmas.
“Es importante enseñarles que la inversión en automatización no tienen por qué estar restringida a grandes cuentas, sino que todas las empresas medianas deben desarrollar su actividad y hacerla más productiva, tienen que apostarles a nuevas tecnologías”, puntualizó el representante de Kardex en el área.
A nivel mundial, Kardex factura unos 410 millones de euros.
