La vida laboral cambió con la pandemia y se hizo cada vez más común trabajar desde casa. De hecho, hoy en día muchas empresas han implementado modalidades de trabajo híbrido o completamente remoto.
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Precisamente, una de las herramientas que tomó más fuerza en ese periodo fue Zoom.
La empresa, con sede en San Francisco, multiplico quince veces el precio de su oferta pública luego de que las empresas recurrieran a este software de videoconferencias para continuar las operaciones durante la pandemia.
Para ese entonces, su valor bursátil alcanzó un máximo de $140.000 millones de dólares, convirtiéndose en la compañía que más se benefició por la crisis mundial.
Ahora, esta empresa busca que sus empleados retornen a las oficinas. Aquellos que vivan a 80 km de su sede deben acudir obligatoriamente dos días a la semana.
En un comunicado emitido por Zoom, la compañía afirmó que con esta medida se busca "alcanzar una mejor posición para utilizar nuestras propias tecnologías, seguir innovando y apoyar a nuestros clientes globales".
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Además, añadió que: "seguirá aprovechando toda la plataforma Zoom para mantener a nuestros empleados y equipos dispersos conectados y trabajando de forma eficiente".
En otras palabras, Zoom está intentando, como sus clientes, adoptar la modalidad de trabajo híbrido.
Al respecto, el consejero delegado del grupo, Eric Yuan, el pasado mes de mayo en una reunión con inversores, manifestó que "el trabajo híbrido va a quedarse entre nosotros. Dejar que los empleados trabajen en cualquier sitio se ha convertido en cierto modo en una moda. Es difícil obligar a los empleados a volver".
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