Desde hace seis años la firma Jaime Arteaga y Asociados entrega el Índice de Inversión Social Privada, un documento en el que la compañía encargada de gestionar proyectos para el desarrollo tiene como objeto medir el esfuerzo que viene implementando el sector privado en mejorar las condiciones de vida de comunidades o grupos de población a partir de su decisión voluntaria de invertir en proyectos sociales y medioambientales.
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Para su edición de 2022, la cual será presentada en el marco de la 1° cumbre de inversión social privada que se realizará hoy y mañana en Bogotá, el reporte contó con la participación de 151 empresas que operan en el país y se encuentran entre las 1.000 con más ventas, las cuales, según la firma, realizaron durante el año 2021 un esfuerzo financiero en inversión social de $3,6 billones.
Esto representó un aumento de 28% en relación al resultados de la inversión social voluntaria que reportaron las firmas para el reporte de anterior, que evidenció una inyección de $2,8 billones en 2020 para estas iniciativas. El Índice de Inversión Social Privada encontró también que 105 empresas participantes en ambas mediciones incrementaron 5% sus inversiones en proyectos sociales.
Según el documento, las inversiones voluntarias realizadas por las empresas participantes durante el 2021 fueron equivalentes a casi la mitad de todo el presupuesto del Departamento Nacional de Prosperidad Social (DPS).
Así mismo, el reporte evidenció también como estas compañías impulsaron un esfuerzo financiero en inversión ambiental por $3 billones durante el 2021, mientras que en 2020 las inversiones fueron de $1,8 billones. El Índice reconoce que, si bien el 73% de lo que reportan las empresas está asociada a compromisos contractuales con el Estado ($2,2 billones), y 10% a compensaciones ($290.000 millones), las inversiones ambientales son voluntarias y equivalen a 1,5 veces el presupuesto del Ministerio de Medio Ambiente. En 2021 el 17% de las inversiones ambientales fueron voluntarias, y ascendieron a $503.000 millones.
Algunas de las empresas participantes son Accenture, Bancolombia, Acerías Paz del Río, Porvenir, Grupo Sura, Ecopetrol, Citi, PepsiCo, Alpina, Bavaria, Claro, Cemex, Jerónimo Martins (Ara), la Organización Carvajal o Ramo. También figuran en el listado Cueros Vélez, Corona, Incauca, Geopark Colombia, Nestlé, Terpel, Corficolombiana, Gerdau Diaco, Avon, Banco de Occidente y General Motors, entre otras.
Los sectores que más participan
Entre los sectores que inyectaron mayor cantidad de recursos el año pasado en inversiones sociales destacan las empresas del sector mineroenergético, que fueron las responsables de 31% de las inversiones sociales voluntarias. Les siguen las de agroindustrias, con una participación del 20% de la inversión; el financiero con 19% y las empresas del sector industrias, con un aporte del 17% de los recursos asociados.
En el caso de las compañías que se ubican en el sector de tecnología y telecomunicaciones, estas aportaron el 3% del total de las inversiones;por el lado de las empresas de salud la contribución social ascendió a 2% del total de los recursos en 2021, mientras que las empresas de servicios fueron responsables del 1%; las de belleza, aseo y cuidado del hogar del 0,50% y el automotriz del 0,10% de la inversión social.
En relación con la distribución de esa inversión social, el Índice de Inversión Social Privada, encontró que 17% de ellas se destinaron a desarrollo económico, el 15% hacia infraestructura y el 13% de las inversiones sociales fueron para desarrollo rural.
Por otro lado, las personas en situación de pobreza, así como los niños, niñas, adolescentes y jóvenes son los grupos poblacionales en los que más se focalizan las inversiones, a cada uno de estos les correspondió el 20% de los recursos de estas empresas en 2021, con lo que el 40% del total se canalizó hacia esas dos poblaciones.
(Además: Estas serían las tendencias para invertir en segundo semestre del 2022).
En cuanto a las inversiones ambientales, el sector mineroenergético destaca especialmente, con 79% del total, seguido por el agroindustrial y de alimentos y bebidas, con el 7%. Las empresas de construcción aportan el 5% del esfuerzo financiero de estas compañías, mientras que el sector de tecnología y comunicaciones es responsable del 3%. En el caso de las inversiones ambientales voluntarias, el sector mineroenergético es también el que más aporta, con 45% de los recursos.
El índice destaca como la energía es el principal asunto en que se invierte, con 29% de las inversiones, mientras que a emisiones de gases de efecto invernadero se destina el 28,7% de los recursos; a la protección de bosques el 25,1% y a residuos y materiales el 25,1%.
LAURA LUCÍA BECERRA ELEJALDE
