Desde hace seis meses, arquitectos e ingenieros cuentan con una plataforma en la cual licitan e invitan a cotizar a los proveedores para construcción, a través de una operación directa, sin intermediarios, que ha generado grandes ahorros y transacciones más rápidas y seguras.
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Se trata de Licify, que ya cuenta con más de 600 usuarios y proyecta para este año multiplicar la cifra por diez. Según Ricardo Wills, gerente general de Cumbria Holdings, firma que impulsa este sitio junto con el Grupo Olloqui, “la empresa ha registrado más de 150 licitaciones exitosas por cerca de $87.000 millones”.
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El primer paso, que era atraer a las compañías del sector, se dio de forma gradual, pero rápida. Según el directivo, “seis de las diez compañías constructoras más grandes del país ya tienen al sitio como su aliado a la hora de escoger a sus proveedores, mientras que otras 25 están probando el servicio”.
Entre las empresas que están en la plataforma se destacan Cusezar, Prodesa, Proksol, CNV, Hitos Urbanos, Grama, Master Building y Constructora Río Azul, cuyos representantes entendieron la fortaleza del servicio.
Según Wills, se están resolviendo varios inconvenientes para los proveedores, “que sentían que no tenían el espacio ni la seguridad de que sus ofertas llegaran a manos de quienes toman las decisiones de compra en las obras”.
MÁS ACCESO
El directivo agregó que a partir de esta necesidad “descubrimos que apoyándonos en la tecnología podríamos darles la solución. En el caso de las constructoras, el problema era poder acceder a nuevos proveedores y, de esta forma, obrar con más transparencia, trazabilidad y agilidad a su proceso de compra. Con Licify se ha logrado”, enfatizó.
De paso, otra ganancia del proceso está en el apoyo a la industria nacional, que poco a poco se ha abierto a la plataforma para acceder a clientes nuevos y de todos los tamaños, con el valor agregado de una gestión comercial óptima.
Por el lado de las empresas edificadoras, el directivo reveló que pueden generarse ahorros y lograr unas utilidades entre el 5% y el 20%, aproximadamente. ¿La razón? Porque ante la posibilidad de contactar nuevos proveedores, también se impulsan rondas de renegociación, subastas inversas y reportes estratégicos para que las firmas desarrolladoras de los proyectos puedan medir el impacto en tiempo real.
