Carlos

Nuestra Política de Tratamiento de Datos Personales ha cambiado. Conócela haciendo clic aquí.

close
Beethoven Herrera Valencia

Apartheid educativo (II)

Un reducido número de estudiantes de estratos 1, 2 y 3 accedía al programa ‘Ser Pilo Paga’. Sólo beneficiaba puntajes superiores del percentil 90%.

Beethoven Herrera Valencia
POR:
Beethoven Herrera Valencia

Los autores del libro La quinta puerta consideran que hay un apartheid territorial por las brechas entre unas regiones con oferta educativa amplia y de calidad, frente a la periferia. Y concluyen que la mala calidad en la educación pública, afecta también a la educación popular desde la primera infancia, donde la calidad de la educación también varía dependiendo de la capacidad económica.

Si se compara la educación tecnológica y técnica respecto de la universitaria se evidencia que en estratos 4, 5 y 6 la participación en la educación universitaria se ubica por encima del 90%, prevaleciendo sobre la educación tecnológica y técnica. Y frente a la baja tasa de acceso a educación universitaria en los estratos 1 a 3, surgió el programa ‘Ser Pilo Paga’, que buscaba beneficiar a los alumnos con puntajes más altos en pruebas saber 11, pues el 60% de puntajes altos en pruebas Icfes correspondían a estudiantes de estratos 1, 2 y 3.

En dicho programa los aspirantes podían elegir libremente la institución universitaria y la gran mayoría prefirió universidades privadas que cobran matriculas elevadas, de modo que el costo fiscal del programa fue elevadísimo. Pudo ocurrir que las universidades privadas compensaran con esos cuantiosos recursos públicos la caída de la matricula general.

Los autores mencionados mostraron que un reducido número de estudiantes de estratos 1, 2 y 3 accedía al programa ‘Ser Pilo Paga’, pues sólo beneficiaba a los puntajes superiores del percentil 90%. Hay quienes sostienen que esa iniciativa logró cerrar las brechas de acceso a la educación superior cerca de un 16% y aportó diversidad en los entornos universitarios. Pero su costo entre 2017 y 2023 fue estimado en $3,32 billones, equivalente al presupuesto de inversión del Ministerio de Educación, y sólo benefició al 2,5% de estudiantes que presentaron la prueba Saber 11.

¡Sin duda un elevado costo para una reducida cobertura! El hecho de que ese financiamiento llegara mayormente a universidades privadas al tiempo que las universidades públicas veían colapsar sus estructuras y eran obligadas a aumentar su cobertura manteniendo constante el financiamiento, en términos reales, generó protestas masivas que obligaron a reformular el programa.

La participación en las instituciones educativas tiene implícito prestigio, un lenguaje y las relaciones de trabajo que establecen los estudiantes al formar parte de una institución. Pero el apartheid educativo homogeniza el ambiente educativo, pues al depender de los ingresos de las familias de los estudiantes puede llegar a limitar las relaciones sociales a personas de su mismo estrato social.

En cuanto al prestigio, las creencias dominantes, reproducidas por los medios de comunicación, instituciones multilaterales, los gremios y la dirigencia política tienden a sobrevalorar la calidad de la educación privada respecto de la pública. Ello no se basa en valoraciones objetivas si se analizan el número de patentes, revistas indexadas, grupos de investigación y resultados obtenidos por sus egresados en el examen profesional Saber Pro.

BEETHOVEN HERRERA VALENCIA
​Profesor Emérito de la Universidad Nacional, universidades Javeriana, Magdalena y Prime Business School.

Destacados

Más Portales

cerrar pauta