La encuesta de Fenalco señala que si bien la natilla (31%) y el buñuelo (27%) son las comidas favoritas, el pavo es clave en la mesa de los colombianos para estas festividades.
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El año pasado, en el mercado interno el producto nacional alcanzó una participación de 59,6% frente al importado.
Los productores y comercializadores de pavo en el país han venido trabajando para lograr la “democratización” del producto.
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“Tradicionalmente el consumo de pavo en Colombia se dispara en los meses de noviembre y diciembre, porque el producto es muy utilizado para las cenas de Navidad y Año Nuevo. En el último trimestre se logra, en promedio, el 40% del volumen”, explica un vocero de Pavos del Campo, una de las empresas que mueve este mercado.
Considera que hay un gran potencial de dinamizar el consumo en otras temporadas porque existe desconocimiento de las bondades que trae para la salud consumirlo de manera continua.
El reto de Pavos del Campo es incrementar el consumo per cápita de esta carne.
Según sus cálculos, en la actualidad está por debajo de los 80 gramos.
Por su parte, el de carne es de 17,3 kilos; pollo, 35 kilos; y pescado 8,8 kilos, señalaron.
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