Bajo la sombrilla del distribuidor SKBergé, llegó a Colombia la Hyundai Tucson NX4. Como siempre la marca coreana sorprende con el diseño de sus carros, y esta cuarta versión de la Tucson, parece haber sido esculpida en un taller de arte.
(SKBergé y Eljuri trabajan en acuerdo para vender Hyundai en Colombia).
La carrocería está llena de detalles por donde se mire: parrilla frontal con 10 luces led, que dan una sensación futurista y los faros escondidos en el bomper, le imprimen personalidad.
Sus costados destacan líneas atrevidas y diferentes que le dan agresividad y porte al vehículo.
Pero tal vez la principal virtud del vehículo está en el confort al manejarlo. Los trayectos largos ponen a prueba la resistencia del conductor, y esta SUV sin mayores pretensiones en la silletería, ofrece relax al manejar.
Tiene un motor dos litros y en la versión Prestige AT incluye seis airbags, cortinillas en las ventanas traseras, pantalla central de 10,2 pulgadas, climatizador automático bizona con mandos táctiles, botón de encendido con llave inteligente y techo panorámico.
('Los carros de hidrógeno ayudarán a proteger los empleos', Hyundai).
Otra de las ventajas del carro, es su capacidad de respuesta para sobrepasar otro vehículo en carretera (en la versión automática), la máquina responde como si se tratará de un carro mecánico que se devuelve a tercer para entregar una buena respuesta en el paso.
En este modelo, NX4, los juguetes van según el precio, que el comprador esté dispuesto a pagar.
La SUV llega en varias presentaciones, en precios que oscilan entre los $100 y los $119 millones.
Ahora, al frente a la marca queda un experto en el mercado colombiano, Luis Torres, a quien le toca la tarea de volver a llevar esa marca a los lugares de preferencia que alguna vez tuvo en el mercado colombiano.
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