Elegir un colegio adecuado para los hijos es una tarea que no se puede hacer medias, en especial cuando se tiene en cuenta que este espacio jugará un papel importante dentro de su formación.
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No obstante, esta labor tampoco suele resultar fácil, puesto que se deben contemplar diferentes factores a lo largo del proceso. Estos aspectos van desde la alineación de valores hasta el desarrollo físico, emocional y creativo de los estudiantes.
En esa evaluación también es importante considerar que un buen colegio no solo debe ofrecer educación de calidad, sino que debe proporcionar un entorno seguro en el que los niños y jóvenes puedan desarrollar sus talentos y habilidades. De allí la importancia de que los padres de familia se informen antes de tomar una decisión, para así poder garantizar que su hijo recibirá las herramientas necesarias para su crecimiento académico y personal.
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Antes que nada, es importante considerar que cada institución educativa tiene su propio ambiente escolar, plan de estudios, actividades extracurriculares y profesorado. Con eso en mente, la clave está en conocer el perfil del estudiante para poder elegir un lugar en el que se sienta cómodo y acogido.
Lo anterior también va ligado a que un espacio afín con el alumno no solo nutrirá su aprendizaje, sino que lo motivará a explorar nuevas pasiones y capacidades.
“Como familia debemos estar de acuerdo con la filosofía de ese colegio, pero no podemos identificar esa filosofía si primero no sabemos qué valores priman en la familia, cómo se ponen los límites o cuáles son las expectativas que se tienen. La educación es un trabajo colaborativo y cuando ese trabajo es exitoso, armonioso y compartido, el resultado es maravilloso", explica Rosita Caro, directora del Colegio Hacienda Los Alcaparros.
Por esa misma línea, Caro destaca la importancia de asegurarse que los valores y principios que promueve la institución sean acordes con los que se inculcan desde casa. Esto facilitará el tener una educación más enriquecedora para sus hijos.
Otro aspecto a tener en cuenta es el desarrollo físico integral. En ese sentido, se recomienda buscar un colegio que lo promueva a través de actividades deportivas, recreativas y de bienestar. Esto fortalecerá la salud, la motricidad, fomentará el trabajo en equipo y la disciplina.
Tampoco se aconseja dejar de lado el tema emocional, por lo que la experta aconseja verificar que la institución, además de ofrecer un sólido apoyo psicológico, brinde el acompañamiento en aspectos como el desarrollo de confianza, seguridad y habilidades para manejar situaciones difíciles.
A esta lista se suma el elegir un colegio que fomente la creatividad y el pensamiento crítico. "Esto permitirá que los estudiantes exploren y desarrollen sus talentos únicos, preparándolos para resolver problemas en un mundo en constante cambio", señala Caro.
El enfoque educativo es otro aspecto a contemplar, ya que el identificarlo le permitirá saber cuál se adapta mejor a las necesidades y preferencias del estudiante.
Además, considere la proyección del colegio y si ofrece programas que se alineen con los intereses y aspiraciones profesionales de sus hijos. "Asegúrese de que proporcione orientación académica y profesional para prepararlos adecuadamente para la universidad o el mundo laboral", agrega la experta.
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Además de considerar el aspecto emocional y educativo, Rosita Caro recomienda complementar su búsqueda con acciones que le permitan conocer mejor las opciones disponibles.
En ese orden de ideas un primer paso es indagar respecto a los diferentes colegios en su área y familiarizarse con sus filosofías educativas, programas académicos, valores y calidad de los docentes. Caro aconseja buscar aquellos que se alineen con sus expectativas y necesidades, y donde los profesores sean altamente capacitados.
De la misma manera, programe visitas a las instituciones para observar las instalaciones, conocer la atmósfera, la cultura escolar y la comunidad. Esto le dará una idea más clara de si es el ambiente adecuado para sus hijos.
Además, asegúrese de conocer el tamaño promedio de las clases. Un menor número de estudiantes por aula puede permitir una atención más individualizada y personalizada.
Verifique qué actividades extracurriculares ofrece el colegio, como deportes, arte, música y otros intereses que puedan enriquecer la experiencia educativa.
"Valore la ubicación del colegio y cómo se adapta a sus necesidades y horarios familiares, para facilitar la logística diaria y reducir el estrés asociado con largos desplazamientos", destaca Caro.
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