Emisiones de acciones y títulos de renta fija nuevas equivalentes al 1% del producto interno bruto frente a las que hoy representan el 0,7%, transacciones en el mercado secundario con esos papeles del 10% del PIB frente a las del 7% actuales y una mayor penetración del mercado de seguros, todo hacia el 2025, hacen parte de las claves del proyecto de ley del mercado de capitales, que el Gobierno presentará al Congreso en los próximos días.
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La idea es ampliar la oferta de instrumentos o vehículos de inversión para movilizar recursos hacia sectores antes no atendidos y emisores e inversionistas que antes no habían participado, con el fin de hacer que los mercados sean mas profundos y líquidos.
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Además, el Gobierno busca que con las nuevas herramientas del mercado de capitales se contribuya a la formalización de la economía con mecanismos como el crowdfunding (financiación colaborativa), stranded assets (activos inmovilizados) o venture capital (inversiones para emprendimientos), entre algunas de las alternativas.
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Para Felipe Lega, director de la Unidad de Regulación Financiera (URF) del Ministerio de Hacienda, se está finalizando la incorporación de las recomendaciones de la Misión del Mercado de Capitales que en noviembre de 2019 entregó un completo informe decantado con diferentes actores de la industria y que además ha contado con los aportes de especialistas en diferentes áreas.
El proyecto contiene un conjunto de tareas y un cronograma de corto, mediano y largo plazo para el desarrollo del marco regulatorio en una ley que será de carácter estatutario y que modificará varias normas clave del sistema financiero.
Lega explicó que el proyecto busca promover la competencia de los actores para que ofrezcan un menú de varios servicios, que con más transparencia y bajos costos beneficien a los usuarios e inversionistas.
Anunció que se hará un cambio en la aproximación regulatoria y de supervisión para hacerla más ágil, pero también con más herramientas sancionatorias y también para evitar arbitrajes. Sin embargo, para eso las entidades tendrán que decir a qué se dedican explícitamente frente a otras funciones que pueden desarrollar pero que no las realizan.
Dijo que la URF, tras nueve años de funcionamiento, se fortalecerá humana y tecnológicamente, y tendrá la capacidad de cobrar una cuota a las entidades bajo la órbita de las Superintedencias Financiera y algunas de la Economía Solidaria.
Otro tema importante en el proyecto de ley será el de los temas de pagos.
“En la URF llevamos algunos años con la discusión de los pagos de bajo valor y estamos ad portas de sacar un decreto al respecto. Lo que queremos es que en más lugares de Colombia haya más sistemas de pago, cualquiera que sean, con el propósito de reducir la dependencia del efectivo”, dijo Lega.
Además, anunció un marco regulatorio para tratar de unificar las funciones que sobre el tema de pagos tienen los Ministerios de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y el de Comercio Industria y Turismo para que el Banco de la República y la Superintendencia Financiera regulen dichos sistemas.
La idea, según Lega, es “que lleguen mas actores al mercado de capitales. Mucha gente hoy no participa ya que la gran mayoría de los actores que hay no los atienden porque se especializaron en clientes que tienen altos recursos”.
