Después de ser conciliada por el congreso, la Ley de Acción Climática es un hecho, con la sanción del presidente de la república, Iván Duque Márquez.
(Aprobada en el Congreso la Ley de Acción Climática).
El proyecto de ley fue radicado en septiembre de este año por los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Interior, Transporte, Hacienda y Crédito Público, Minas y Energía, Vivienda, Ciudad y Territorio; Agricultura y Desarrollo Rural, y Comercio, Industria y Turismo.
El objetivo principal de esta ley es diseñar unas medidas a corto, mediano y largo plazo que permitan al país alcanzar la tan prometida carbono neutralidad a 2050, lo que quiere decir que el país pondrá objetivos fijo para compensar sus emisiones de Gases de Efecto Invernadero, GEI.
Las metas que plantea esta ley buscan reducir a cero la deforestación y las emisiones de carbono negro en un 40%. Además de conseguir que las emisiones de GEI disminuyan en un 51%.
Este proyecto de 7 títulos y 24 artículos contempla acciones como: declarar el 30% de los mares y áreas continentales como zonas protegidas.
(‘Presentaremos una ley de acción climática’).
Además de restaurar al menos 1 millón de hectáreas según las aptitudes de su suelo.
Por otro lado, la ley pretende conseguir que 135 cuencas hidrográficas sean analizadas y tratadas, teniendo en cuenta el cambio climático como parte de su ordenación ambiental. Esta meta va de la mano con la de incluir en los planes de ordenación a las áreas costeras y su manejo de acuerdo con el riesgo inminente por los cambios de temperatura.
Asimismo, la ley de acción climática contempló estabilizar la Frontera Agropecuaria, con un manejo sostenible de 2,5 millones de hectáreas bajo contratos de conservación.
Respecto a la transición energética, bajo este proyecto, el país tendrá 600 mil vehículos eléctricos a 2030.
Así como implementar al 100% el Programa Nacional de Cupos Transables de Emisión, similar al mercado de carbono.
Otra de sus metas es reusar el 10% de las aguas residuales domésticas.
JULIANA PEÑA
