Venezuela no pasa por su mejor momento. La crisis en el país vecino se ha intensificado desde las elecciones presidenciales de finales de julio, en las que el Consejo Nacional Electoral (CNE) dio por ganador al actual presidente Nicolás Maduro.
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La situación ha derivado en protestas y cientos de personas detenidas, así como en una creciente presión internacional para que se divulguen las actas de la votación del 28 de julio, ya que no se publicaron detalles del escrutinio.
En su más reciente columna de opinión en EL TIEMPO, el exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, hizo un análisis de la situación desde la mirada económica y social para entender mejor el panorama que se está viviendo al otro lado de la frontera.
Sobre el primer aspecto, el exministro señaló que los datos son claros. Desde 1999 y hasta 2012, Venezuela experimentó un periodo de inestabilidad macroeconómica, el cual derivo en un colapso durante la administración de Maduro.
"Esto último es evidente: la economía venezolana tuvo en 2023 un producto interno bruto que es menos del 30 % del de 2013. Era todavía un poco más grande que la economía colombiana en 2009; hoy es apenas la quinta parte", destacó.
Nicolás Maduro
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Ocampo también destacó que, en términos comparativos, "es la peor crisis en la historia mundial de una economía en época de paz". En ese sentido, destacó que si bien las sanciones han contribuido a este resultado, tan solo son un elemento del cuadro, pues también han intervenido otros factores como la emigración masiva.
Desde una mirada social, los datos son también dramáticos. De acuerdo con las estimaciones del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, es virtualmente el único país latinoamericano que no ha tenido avance en desarrollo humano desde 2000. A esto se le suma el acelerado aumento de la pobreza como resultado de la alta inflación y el desabastecimiento.
Ocampo también puso sobre la mesa el factor político y el retorno de esa Nación a la tradición antidemocrática que la ha caracterizado durante buena parte de su historia. Para ello pone como ejemplo el caso de Nicolás Maduro.
"Después de sus victorias electorales, todos los procesos en los cuales ha triunfado Maduro han sido irregulares: una victoria discutible en 2013, una elección sin garantías para la oposición en 2018 y una, la reciente, en la que no ha querido reconocer su derrota", indicó. Aquí también se incluyen otros factores de peso como la falta de equilibrio de los poderes públicos, la violación de la libertad de prensa y la persecución a los opositores políticos.
El exministro Ocampo señaló que ese contexto Venezuela merece una nueva oportunidad, tanto en términos políticos como económicos y sociales. Una en la que pueda hacer una "transición política pacífica y negociada entre todas las partes, con apoyo de la comunidad internacional, que permita el restablecimiento de la democracia en el país".
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