El revolcón que se presentó en el sector de vivienda con la subida en los precios de la VIS, a causa del aumento en el salario mínimo, el alza de las tasas de interés y sobre todo, los cambios en el programa estatal de subsidios Mi Casa Ya (MCY) llevó a los hogares buscar alternativas para fondearse y cumplir su sueño de comprar vivienda.
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Entre ellos, los subsidios de las cajas de compensación han sido clave para recuperar un monto similar al que debían pagar los hogares con MCY. Así lo dejan ver las más recientes cifras a agosto de la Superintedencia de Subsidios, en el que se evidencia que los subsidios pagados por las cajas de compensación aumentaron 164% frente al 2022, pasando de 30.370 subsidios dados en agosto del año anterior a 80.372 en el mismo periodo de 2023.
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Respecto a los montos, este año se han desembolsado 13% más. Mientras que para el octavo mes del año de 2022 se pagaron $479.610 millones, este año se han pagado $543.824 millones.
Vivienda
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Este crecimiento, si bien es más acelerado en el último año, la curva es muy pronunciada desde 2020. En los últimos cuatro años cada caja de compensación han aumentado su participación en el sector de vivienda.
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Por ejemplo, Colsubsidio se posiciona este año como la caja de compensación que más desembolsos ha pagado con 37.424, pero por monto, Compensar se lleva la corona con $200.283 millones pagados.
En tan solo las cinco cajas más grandes (con más desembolsos) se han dado 78.756 subsidios, es decir, el 97,9% del total. Además, estas se concentran en las principales ciudades del país, lo que podría ser un inconveniente para las familias más vulnerables y alejadas de los cascos urbanos, pues dependen más de Mi Casa Ya al tener menos alternativas de subsidios de cajas de compensación y recursos a asignar.
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Por lo anterior, a estas familias les ha sido más difícil considerar a las cajas de compensación como una alternativa viable para sopesar el faltante para cerrar su negocio.
Compra de vivienda
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Además, el cambio en la focalización del programa MCY ha perjudicado a aquellos hogares que esperaban sumarse al subsidio de concurrencia que da hasta 50 salarios mínimos para la compra de vivienda. Vale mencionar que este subsidio es la suma de MCY y el de la caja de compensación.
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Según el subdirector de vivienda de la caja de compensación Cafam, Andrés Conto, el cambio en el programa, mediante el decreto 490 del 4 de abril de 2023, que cambió algunos requisitos para ser beneficiarios del subsidio concurrente, “excluyó a muchas familias que antes podían acceder a este subsidio. El anterior factor, sumado a las altas tasas de interés, excluyó a muchos hogares de menores ingresos, trayendo como consecuencia la disminución significativa de los indicadores en ventas de vivienda de interés social y por consiguiente la aplicación de subsidios de vivienda asignados por las cajas de compensación familiar”, explica.
Venta de vivienda
EL TIEMPO
Por su parte, voceros del área de negocio de vivienda de la caja de compensación de Compensar, reconocen que “tanto el subsidio de vivienda que entregan las Cajas de Compensación Familiar como el beneficio de Mi Casa Ya son apalancadores para la adquisición de la vivienda, por lo tanto se apalancan el uno con el otro para brindar un beneficio mayor a las personas para acceder a su vivienda que es lo que llamamos el subsidio concurrente: el subsidio de vivienda de Caja de Compensación y Mi Casa Ya”.
Mientras los hogares reacomodan sus negocios y se acoplan a los nuevos requisitos del programa, deberán continuar buscando alternativas para poder tener cierres en sus negocios y no abandonar su sueño de comprar su primera vivienda propia.
PAULA GALEANO BALAGUERA
Periodista de Portafolio
