La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (Iata por sus siglas en inglés), gracias al trabajo del sector aéreo, cambió sus previsiones para la industria a nivel global y en su asamblea anual anunció que prevé un mejor rendimiento este año.
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Los líderes de la aviación mundial se reunieron entre el 2 y el 4 de junio en Dubái, durante la edición 80 de la Reunión General Anual (AGM) de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional y la Cumbre Mundial del Transporte Aéreo. En el encuentro, aerolíneas, socios estratégicos, asociaciones, fabricantes y medios de comunicación de todo el mundo analizaron en profundidad los temas más relevantes del sector y se dio a conocer el estado de la industria y sus proyecciones globales y regionales.
A nivel general, la Iata prevé que la cifra total de viajeros a nivel internacional alcanzará un máximo histórico de 4.960 millones en 2024. Además, los volúmenes de carga estimados se situarían en 62 millones de toneladas para el mismo año.
“Aunque los resultados de las aerolíneas de la región han sido muy desiguales, América Latina y el Caribe han logrado los primeros beneficios netos tras la pandemia, con 200 millones de dólares en 2023 y una previsión de beneficios netos de 600 millones de dólares en 2024”, agregan.
Pese a los buenos resultados y la mejora de las perspectivas macroeconómicas para 2024 y el crecimiento en las ventas, que ha generado confianza y expectativas optimistas en la industria, esperan que los costes del sector aumenten en un 9,4 % en 2024.
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“Con un precio medio del combustible de aviación de US $113,8 por barril en 2024, la factura total del combustible ascenderá a US $291.000 millones, representando el 31 % de todos los costos de operación”, reconocen.
Respecto a Norteamérica, aseguran que su situación ‘es brillante’, ya que las aerolíneas de esta región terminaron 2023 con 14.800 millones de dólares de beneficios netos y se prevé que también obtengan un valor similar en 2024. Para este año, esto supone aproximadamente 1,90 dólares por pasajero en Latinoamérica y El Caribe y 13,10 dólares por pasajero en Norteamérica.
“En conjunto, el sector obtendrá 60.000 millones de dólares de beneficios de explotación y 30.500 millones de beneficios netos en 2024. Los peores resultados se deben a la inestabilidad económica y social observada en algunas áreas de la región”, explican.
Sobre empleo, a nivel internacional, se proyecta que el indicador total en las aerolíneas alcance los 3,07 millones, superando los 2,93 millones de empleos registrados en 2019.
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Según explicó la Asociación, existen en la región más de 200 aeropuertos a nivel congestionados, ya que la demanda supera la capacidad disponible, la mayoría de ellos de nivel tres.
Vale recordar que existen tres niveles para identificar aeropuertos que pueden necesitar mejoras en procesos operativos o en su infraestructura para gestionar de manera más efectiva el tráfico y mejorar la experiencia de los pasajeros y de las aerolíneas.
Básicamente, los aeropuertos declaran su capacidad (número de operaciones que se pueden realizar). Esa capacidad se divide en 'slots' (horarios de despegue y aterrizaje para poder utilizar la infraestructura). Las aerolíneas, basadas en la distribución de la capacidad aprobada, programan los itinerarios de vuelo.
Sin embargo, para que el proceso de asignación de 'slots' sea adecuado, es fundamental que haya un análisis de capacidad aeroportuaria completo y una capacidad disponible correctamente declarada, para lo cual los aeropuertos deben involucrar a las aerolíneas a través del Comité de Coordinación, el cual es un ente asesor que pretende optimizar la capacidad del aeropuerto, dice la Iata.
En sus palabras, los 'slots' entonces son esa medida para organizar los horarios de las aerolíneas ante una demanda creciente y una infraestructura que no crece al mismo ritmo.
“Los 'slots' aeroportuarios son una solución ante la falta de capacidad en los aeropuertos. La coordinación y correcta asignación de 'slots' es fundamental para generar confianza y certeza tanto en los consumidores, como en las aerolíneas. Los 'slots' solo organizan la capacidad existente de un aeropuerto; no la pueden aumentar”, dijo Arantza Mendicoa, responsable de 'slots' para Latinoamérica y el Caribe de Iata.
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También considera que soluciones reales para mitigar la congestión en los aeropuertos son crear mayor capacidad aeronáutica y aeroportuaria, mejorar el control del tráfico aéreo y asignar en los 'hubs' la máxima capacidad disponible que sea requerida a la aviación regular de pasajeros y carga. “Ejemplo de ello es el estudio de capacidad realizado por Iata para el Aeropuerto El Dorado, con 23 recomendaciones para aumentar dicha capacidad”, agrega Arantza Mendicoa.
No obstante, vale recordar que, por ejemplo, Colombia ha tenido dificultades entre sus operadores por esta distribución. En 2023, con la salida de las aerolíneas Viva y Ultra Air, el mercado solicitó dichos 'slots' que, en muchos casos, consideraban que estaban distribuidos de manera inequitativa.
Por tal motivo, la Iata recomienda asignar esa capacidad a las aerolíneas de manera justa, neutral y transparente para garantizar la libre y sana competencia.
“Las Directrices Mundiales sobre Slots Aeroportuarios (Wasg, por su sigla en inglés) ofrecen competencia, crecimiento y acceso a aeropuertos siempre congestionados en un proceso simple y práctico que es justo, neutral y sostenible. Las aerolíneas de bajo costo han ingresado a aeropuertos congestionados con las Wasg en su lugar, y han crecido y competido con los actores establecidos, lo que conduce a beneficios para los consumidores y las economías por igual”, agregó Paula Bernal, country manager Colombia Iata.
PAULA GALEANO BALAGUERA
Periodista de Portafolio
