En el marco de la Asamblea del BID moderé un panel sobre la relocalización de la producción o nearshoring con el Ministro de Comercio, el Director Ejecutivo del BID y la Presidenta de ProColombia. La conclusión es que tenemos la oportunidad de convertirnos en un actor de operaciones de ‘nearshoring’, como parte de una nueva estrategia competitiva y de inversión para el país.
Un estudio del CESA y la Universidad de Castilla La Mancha, muestra el potencial de la relocalización de industrias del sudeste asiático en Latinoamérica. Para Colombia, el valor agregado aumentaría en 550 millones de dólares, generando 40 mil nuevos empleos y una reducción de los gases de efecto invernadero. Los problemas de las Cadenas Globales de Valor (CGV) frente a perturbaciones como la pandemia, son un escenario de oportunidad. En efecto, McKinsey Global Institute estima que cada 3,7 años ocurre una interrupción de las CGV con duración superior a un mes.
Entre estas disrupciones se cuentan los efectos de terremotos o las consecuencias del calentamiento global. Dos ejemplos, en 2011, después del tsunami en Japón, Toyota cerró sus plantas dos meses, afectando la producción a nivel global. El otro caso es la escasez de microchips que está afectando a compañías de automóviles, por la pandemia. Esto, así como las interrupciones a las CGV, implican costos. Por eso, las compañías se han alejado del modelo de máxima eficiencia y se han acercado a modelos de negocio flexibles, con grado de maniobra como gerenciamientos de las cadenas de abastecimiento, entre las que se incluye el mantenimiento de inventarios de productos críticos y la relocalización geográfica de actividades o lo que es reshoring, back-shoring o nearshoring. Es aquí donde Colombia juega sus cartas por su ubicación cercana a las cadenas globales establecidas en EE. UU. o México. Como lo mencionó ProColombia contamos con condiciones para este reto: acceso al 97% de economías por acuerdos comerciales, competitividad logística en fletes y exportaciones, beneficios de inversiones y zonas francas. El nearshoring, ya tiene resultados: más de 125 oportunidades de inversión, 28 anuncios de inversión, opciones de los hubs de EE. UU, Europa, Asia y Latinoamérica. Esto se da en momentos en los que vivimos la peor crisis económica y debemos superar barreras estructurales, como infraestructura y facilitación de comercio.
Desde la academia seguimos con la responsabilidad de mejorar el capital humano y de formar mejores gerentes. Se necesita una generación de líderes empresariales orientados hacia el mundo y con visión de responsabilidad de generar valor económico. Conscientes de la emergencia climática, debemos hacer esfuerzos en este sentido. Las empresas no escapan a esta realidad y serán agentes de cambio. Aprovechemos el momentum del viraje de las empresas para la reactivación sostenible.
Henry Bradford Sicard
Rector CESA
