Desde el 2022 la empresa de cemento y concreto Cemex ha alineado su negocio en pro de la sostenibilidad ambiental. Este trabajo la llevó a recibir, desde ese año, la validación de metas de descarbonización de la Science Based Targets initiative (SBTi). Además, entre sus objetivos está no solo la reducción emisiones de CO2, sino incorporar procesos que hacen circular su economía, lo que no solo es eficiente en materia de costos, sino ambientalmente responsable.
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Uno de los procesos más innovadores de la firma es usar materias primas que para otros pueden ser desechos. En el caso de los aditivos, que se usan en el proceso del concreto para aportar propiedades para hacer más resistente, durable o moldeable el producto, han incorporado dos nuevas técnicas: la vinaza, un subproducto líquido de la destilación de la caña de azúcar y el almidón.
“Hace un par de años, la compañía se enfocó completamente en los objetivos de sustentabilidad, y desde el área de aditivos pensamos que podíamos hacer porque gran parte de la materia prima era importada. Entonces, discutimos ¿cómo podemos empezar a nacionalizar esa materia prima y que vaya de la mano del medio ambiente? Ahí nació la idea de la vinaza, y luego del almidón, dos materias primas que funcionan para crear aditivos”, explicó uno de los ingenieros del centro de innovación de la planta.
Estos aditivos apuntan a ser exportados a nivel internacional, hoy ya son probados en países de la región como Perú.
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Cemex
Guillermo Ossa / EL TIEMPO
Otro de los productos que salió desde ese laboratorio en pro del medio ambiente es el Isodust-1.000, un controlador de polvo. Este nació de la necesidad de buscar otro producto para no ‘levantar polvo’ en las vías no pavimentadas, las cuales usaban agua para generar este efecto. Ahí el Isodust-1.000 se consolidó como una solución a este consumos excesivo y se transformó en tan solo unas gotas.
“Sabemos que el agua es un recurso que debemos de cuidar, es un recurso vital, por eso, desde el área de desarrollo y de aditivos, desarrollamos un producto que por medio de una aplicación de gotero, aplicamos sobre el área por medio de riego y funciona como un pegante que aglomera las partículas de polvo y ante el tránsito vehicular, sencillamente ya no se va a levantar, ya no volará”, explican.
“Con eso evitamos que el cliente o la comunidad haga riegos un par de días, tres veces al día, consumiendo agua de los diferentes cuerpos híbridos. Estamos haciendo una prueba a gran escala con un cliente floricultor, que en sus vías tenía la problemática y no solo polvo como molestia, sino que empezaba a acumularse en el plástico de las invernaderas. Esto disminuye el proceso de fotosíntesis de la flor, por lo tanto ellos tienen menor productividad y entendemos que ese plástico para ellos es muy costoso”, agregan.
Desde el proceso creativo, también nació la idea de generar aditivos a partir de las demoliciones. Estos escombros son usados para generar el polvillo de diversas bondades y así usarse en el proceso de nuevo concreto.
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Laboratorio de tecnología e innovación, Cemex
Sergio Acero
Además, en línea con la conciencia por el uso del agua, Cemex recicla el 100 % de sus aguas lluvias y el 29 % o usa en sus productos. Así mismo, de la mano de empresas de otras industrias, trata el agua y también la reincorpora en sus procesos. A la fecha ha trabajado con Bavaria, Crem Helado y Femsa.
En sus plantan incluso tienen instalaciones de paneles solares para el uso administrativo, aunque van por buen camino para usarlo en producción. En recolección tienen sus puntos de acopio de ‘desechos’ que se usan en distintos proyectos, también crearon conciencia entre sus colaboradores para usar menos productos de un solo uso y ser así 100 % responsables del medio ambiente.
“El objetivo de Regenera es atender a una diversa base de clientes en prácticamente todos los sectores de la economía del país: industria, manufactura, agroindustria, minería e hidrocarburos, comercio, entretenimiento y entes gubernamentales, para darle un manejo circular y sostenible a residuos municipales e industriales. Adicionalmente se aprovechan residuos de construcción, demolición y excavación, para reincorporarlos en procesos productivos”, explican.
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En materia de emisiones, Cemex se ha puesto como meta ahorrar en traslados para la venta de sus productos. Por eso, desde la eficiencia en logística, tienen mecanismos de planeación de viajes y así llevar productos más rápido y con menos costos. A la fecha han reducido mediante este manejo el 20 % de sus emisiones.
Por último, vale recordar que la empresa además tiene una línea de productos no solo en el que sus materias primas son amigables con el medio ambiente, sino que por sus bondades, en las construcciones también se permiten ahorros a largo plazo.
PAULA GALEANO BALAGUERA
Periodista de Portafolio
