El ‘Decreto 1’ que va a recoger toda la normatividad aduanera vigente en el país y estaría cercano a ser publicado por la Dian, así como las consideraciones para la creación de una autoridad portuaria, son los temas que tienen aguardando al sector logístico colombiano para dar el siguiente paso, sobre todo, en temas de facilitación del comercio.
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Esas son dos de las principales novedades que le comentó a Portafolio, Miguel Ángel Espinosa, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac), quien también hizo énfasis en los retos que se tienen en materia de transporte por vías férreas y fluviales del país, particularmente -en el último caso-, del río Magdalena.
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“Entendemos que la Dian está ad portas de publicar el muy esperado 'decreto 1' o 'libro 1' que va a recoger toda la normatividad aduanera que esté vigente”, comentó el ejecutivo, enfatizando en que esto se da como solución a una de las grandes dificultades que tiene el país en materia logística y de simplificación comercial. “Hay muchas normas dispersas y nadie sabe, ni siquiera el sector privado, y muchas veces el sector público, qué está vigente y qué no”, dijo.
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“Quiero que hagamos un gran llamado nacional al Gobierno, para que ese ‘decreto 1’, que ya está listo, salga al aire y demos mayor tranquilidad y mayor seguridad jurídica, no solo a los empresarios que están en Colombia, sino a aquellos que están en mercados internacionales pensando en invertir en el país”, señaló Espinosa.
Autoridades portuarias
Lo otro que se está ‘cocinando’, a nivel de puertos particularmente, es un proyecto de ley que da pie a la conformación de las autoridades portuarias en el país en donde alcaldías, gobernaciones, sector público y sector privado “confluyen para empezar a tomar las decisiones en materia de inversión”.
Aunque Fitac muestra su expectativa ante los beneficios que puede traer consigo este plan, manifiesta dos preocupaciones: la primera, aseguran, es que “se deben establecer claramente cuáles son las responsabilidades y límites frente a entidades como la Dimar, que es la dirección marítima a nivel Colombia (...) la Dimar debe jugar un papel preponderante en esas autoridades portuarias”, opina la federación.
De otro lado el tema de corrupción, y la poca funcionalidad a nivel de entes gubernamentales en algunas zonas portuarias como Buenaventura, ponen a dudar al gremio de agentes logísticos sobre la viabilidad en la ejecución de la medida.
Espinosa destacó que Fitac está trabajando para que en el proyecto se haga un diagnóstico conjunto con los diferentes actores público-privados y que todos lleguen a “tener un rol importante” en las autoridades portuarias.
De otro lado, en materia de transporte por vías férreas y fluviales, son más los asuntos pendientes que el trabajo existente. Particularmente sobre la navegabilidad del río Magdalena, Espinosa comenta que Cormagdalena “está haciendo unos importantes esfuerzos” para darle una fluidez y una profundidad mucha más amplia para que se vuelva un corredor logístico de la mayor importancia.
No obstante, aclara que para que las operaciones a través de este espacio puedan ser representativas para Colombia hay que “conservar un nivel de profundidad del río en todos sus tramos hasta llegar a la desembocadura en el puerto de Barranquilla y ya allí, tener una hondura a nivel de dragado que permita que grandes embarcaciones puedan llegar sin ningún tipo de restricción”.
“El principal reto logístico que tiene el país en este momento es tener una integración modal o multimodal. Le seguimos apostando a los temas de transporte carretero y marítimo y estamos haciendo una gran apuesta para modernizar los puertos del país y para ampliar la red de carreteras”, concluyó Espinosa.
Diego Vargas Riaño
En Twitter: @vardie_
