Desde hace 10 años, RC Towing ha venido capacitando a cientos de operadores de grúa en Colombia, permitiendo que más personas, dentro y fuera del país, puedan prestar un mejor servicio de asistencia vehicular. Según Sergio Ríos, fundador e instructor de este emprendimiento, su programa de capacitación hoy por hoy combina clases teóricas y prácticas y técnicas esenciales enfocadas en maniobras de carga y descarga de vehículos. Además, esta iniciativa se ha abierto campo en otros países como Panamá, Chile y Estado Unidos.
En entrevista con Portafolio, Ríos contó cómo nació este proyecto que busca revolucionar el mercado de asistencia en Latinoamérica y sobre los planes en el mediano plazo que incluyen una línea de productos.
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¿Cómo llega a fundar este emprendimiento enfocado en capacitar a operadores de grúas de vehículos?
Mi familia siempre ha estado involucrada en todo este mercado de grúas y recuerdo que hace 30 años este era un mercado muy empírico e informal en donde no había mucha preparación por parte de los operadores. Desde joven no estaba de acuerdo con muchos procesos y sabía que se podía mejorar para prestar un mejor servicio. Cuando empecé a trabajar en la empresa familiar me puse a la tarea de incluir nuevas herramientas tecnológicas, en la que se destacó un software, con el fin de gestionar los proceso y los servicios de grúas.
En la medida en que el parque automotor de Colombia cambiaba, y llegaban más marcas y mejores carros, era necesario prepararse para prestar un mejor servicio de asistencia vehicular y es allí en donde nace la iniciativa de capacitar a las personas. Tuve la oportunidad de estar en diferentes mercados como Estados Unidos, Panamá y en Europa y conocer cómo se prestaban los servicios de asistencia y las tecnologías que se implementaban. Es así como en 2014 arrancamos con RC Towing y desde entonces hemos capacitado a muchas personas.
¿Cuántas personas han capacitado en estos 10 años?
Hemos capacitado a más de 2.000 personas. Sin embargo, 1.000 han recibido una certificación con nosotros, logrando pasar tanto los exámenes teóricos como prácticos. Asimismo, durante la pandemia tuvimos varios cursos habilitados de cuatro horas en donde logramos una buena asistencia, pero no emitimos un certificado.
El plan de estudio está diseñado en tres niveles y cada curso es teórico y práctico y cada nivel puede durar entre 8 a 16 horas, dependiendo de la complejidad. Lo interesante de estas clases es que lo que se imparte en la teoría se realiza en la práctica.
Lo más bonito de este proceso es que durante estos 10 años, hemos podido capacitar a personas de Colombia y de otros países, incluyendo Estados Unidos. Sabemos que hay un gran mercado en la región por explorar.
¿Qué incluye estas capacitaciones?
Partimos de un punto importante y es la protección. Es crucial que un operador de grúa use la indumentaria adecuada y las herramientas idóneas para evitar accidentes. Asimismo, debe estar familiarizado con la oferta de vehículos que existe en el mercado, para así entender cómo prestar un mejor servicio y lo que se debe evitar.
Las prácticas en RC Towing incluyen escenarios con vehículos con ruedas frenadas o sin ruedas, usando poleas y eslingas para evitar daños durante los servicios de asistencia y rescate vehicular. Esta formación no solo ha mejorado la seguridad de los operadores, sino que también ha reducido significativamente los daños a los vehículos y la carga transportada.
Este tipo de capacitación es fundamental, ya que, si no se conocen las técnicas, al momento de remolcar un vehículo, el operador puede doblar la suspensión o desalinear el carro.
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Las prácticas en RC Towing incluyen escenarios con vehículos
Cortesía
¿Actualmente están trabajando con grandes empresas para este tipo de capacitaciones?
Nuestro mercado principal son las aseguradoras y las concesiones viales. Hemos trabajado de la mano de Sura, Seguros Mundial, Axxa Asistencia, Iké Asistencia, Concesión Sabana de Occidente, entre otros.
Cabe destacar que también hemos trabajado directamente con empresas que prestan los servicios de grúa en el país.
¿Cómo vienen las finanzas de la empresa?
El negocio ha venido creciendo muy bien en los últimos años. Si bien durante nuestro arranque en 2014, cerramos con una facturación de 60 millones de pesos, el año pasado logramos ingresos por más de $700 millones. Para este 2024 esperamos sobrepasar los $1.000 millones, esa es la proyección.
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¿Cuáles son sus expectativas de expansión?
Sabemos que hay un gran potencial para seguir creciendo, y queremos seguir entrenando a más operadores de grúas en la región. La apuesta es consolidar un hub aquí en Colombia para que vengan personas a capacitarse. Asimismo, queremos llevar nuestro conocimiento a otros mercados y consolidarnos en países como Chile, Panamá, República Dominicana y los Estados Unidos.
También estamos en proceso de sacar nuestra línea de herramientas, con el fin de ofrecer las capacitaciones y las herramientas que necesitan los operadores de grúa. Este proyecto lo estamos trabajando con una empresa americana.
¿Qué se viene para este mercado?
Este es un sector que siempre está en constante cambio y evolución. Por eso es importante que las personas se estén capacitando. Se vienen vehículos eléctricos, lo que demandará un manejo diferente a la hora de remolcar este tipo de carros. Se prevé que para 2030, un 60% de los vehículos sean eléctricos o híbridos, por lo que la forma de prestar asistencia vehicular para esos carros debe adaptarse a los cambios. Pienso que hoy más que nunca, la operación de grúas es esencial, ya que mientras existan vehículos se requerirán los servicios de asistencia.
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