Cada año, todas las firmas de abogados esperan que sus nombres aparezcan en los reportes ‘The Legal 500’, un informe de clasificación e investigación que emite esta compañía con sede en el Reino Unido, que se encarga de evaluar firmas de abogados y juristas de todo el mundo para sus publicaciones, entre las que se incluyen ‘ranking’ y guías anuales.
El análisis avala las firmas bajo 18 categorías: banca y finanzas, mercado de capitales,
competencia de mercados, cumplimiento y delitos de cuello blanco, corporativo, fusiones y adquisiciones, energía y recursos naturales, desarrollo, seguros, propiedad intelectual, tratados y costumbres internacionales, trabajo y empleo, litigio, propiedad intelectual y derecho fiscal, ciencias de la vida, proyectos, leyes públicas, bienes raíces, impuestos, tecnologías de la información, telecomunicaciones y medios de comunicación.
Adicionalmente, las firmas están asignadas a una serie de bandas que se utilizan para clasificar a los bufetes de abogados de acuerdo con su rendimiento y reputación y sustentadas en la opinión de los clientes, colegas y expertos de la industria.
Se dividen en: banda 1, líderes en su campo; banda 2, considerados de primer nivel; banda 3, sólidos en su campo; y banda 4, emergentes en su campo y con un potencial de crecimiento significativo. En el informe se señala que, en términos generales, el cierre de la pandemia “ha producido un aumento significativo de las rescisiones de contratos, lo que posteriormente ha dado lugar a una avalancha de asuntos contenciosos”.
En particular, las empresas están registrando un número especialmente elevado de litigios relacionados con concesiones, ya que los tan anunciados programas de infraestructuras del Gobierno -un estímulo económico clave en un país, cuya economía sigue estando basada en las exportaciones- se estancaron como consecuencia de los retrasos e interrupciones provocados por las medidas adoptadas para limitar la pandemia.
Según el reporte, el país cuenta con un sofisticado mercado jurídico que comprende la integración de grandes firmas de servicios, bufetes de tamaño medios y boutiques especializadas. Este año, la firma con más reconocimientos fue Brigard Urrutia, con 11 menciones en las diferentes categorías y repitió la misma posición del año anterior, con clasificaciones de primer nivel en banca, corporativo y litigios, entre otros.
Posteriormente, está Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría, que sobresalió con seis menciones especialmente en las categorías relacionadas con banca y finanzas. Los siguientes lugares los ocuparon las firmas: Posse Herrera Ruiz, Gómez Pinzón Abogados y DLA Piper Martínez Beltrán, cada una con menos de cinco menciones, pero todas en la banda 1, es decir, son líderes en el país.
En cuanto a particularidades que se destacan en este informe, los expertos resaltan la gestión de Cuatrecasas, que continúa su trayectoria ascendente desde su lanzamiento
en Colombia en enero de 2021. Su proceso de contratación ha continuado a buen ritmo
y dado la bienvenida a un gran número de abogados en sus prácticas bancarias, corporativas y fiscales durante 2021 y 2022.