Así como la economía se desaceleró en el 2023, el sector empresarial bajó el ritmo a sus actividades. La semana pasada Confecámaras, el gremio de las cámaras de comercio, presentó un informe según el cual el año pasado se crearon en Colombia 305.997 empresas, 1,5% menos que en 2022, cuando esta cifra llegó a 310.731 unidades productivas. Igualmente, se ha advertido que hay señales de menor inversión en las empresas.
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A lo anterior se suma el de las operaciones de integraciones empresariales que deben pasar por el visto bueno de la Superintendencia de Industria y Comercio y que conoció Portafolio. Allí se indica una reducción del 29% el año pasado respecto al 2022, al pasar de 256 a 182, es decir 74 menos. Aparte del 2022, solamente en 2019 se consignan más de 200 operaciones. El dato es prácticamente el mismo del 2021, cuando se registraron 184.
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Al analizar los datos consolidados del año pasado, la Superintendencia de Industria y Comercio señala que “en relación con la dinámica de las operaciones de integración empresarial en las actividades económicas, para 2022 estas tuvieron una representatividad del 60,55%, en tanto que para 2023 fue de 70,33%”.
Por sectores económicos, entre los más representativos, la mayoría de operaciones se registraron en el de comercio minorista con 42, cuando en el 2022 sumaron 78. Siguieron combustibles (17), salud y eléctrico, cada uno con 11 operaciones empresariales, y alimentos y bebidas con 10.
Con 9 integraciones cada sector, también aparecen productos farmacéuticos y tecnologías de la información; productos químicos (8), automotriz (7) e insumos industriales. Por trámites, las estadísticas del año pasado muestran que la mayoría corresponde notificación (152), menos que las registradas en el 2022 (199) y algo más frente al registro del 2021 (146). El año terminó con menos integraciones en pre-evaluación: 28. El año precedente fueron 55, mientras que en 2021 quedaron en ese estado 35.
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Integración empresarial
A finales de noviembre, al hacer un primer corte de cuentas sobre las estadísticas, la Superintendencia señaló que este número de operaciones de 256 en el 2022, que pone en evidencia una caída en las integraciones del 2023, fue atípico en relación con el histórico de transacciones desde la expedición de la Ley 1340 de 2009.
“Lo anterior se explica por un incremento de las operaciones de Notificación. Esto estuvo relacionado con la toma de control por parte de Jerónimo Martins Colombia S.A.S. - Tiendas ARA (por medio de operaciones de arrendamiento) de 77 locales comerciales que eran operados por Justo & Bueno. Mientras que, durante todo 2023 Tiendas ARA desarrolló 32 operaciones similares”.
Consultado al respecto, Mauricio Jaramillo, socio y director de competencia en la firma Gómez-Pinzón, explicó que las integraciones empresariales del país están marcadas por las operaciones de fusiones y adquisiciones en Colombia y estas operaciones estuvieron afectadas por la reducción de los negocios, de la capacidad adquisitiva y en la actividad económica del país.
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Para el experto, el hecho de que en las estadísticas la balanza se incline hacia las notificaciones simples “indica que las operaciones que se hicieron fueron de tamaños relativamente pequeños o medianos”.
Sin que todavía se conociera la designación de Cielo Rusinque como la nueva Superindustria, Jaramillo dijo que el año pasado no hubo señales de estabilidad en el manejo de la autoridad de competencia.
Desde su perspectiva, esta situación ha afectado los procesos y ha puesto demasiadas dudas e incertidumbre sobre cómo el organismo de control de competencia va a aproximarse a transacciones y a mercados relevantes, ya que eso dificulta la forma en que las empresas deben estructurar integraciones.
CONSTANZA GÓMEZ GUASCA
Portafolio
