En la columna mensual que, durante más de diez años, generosamente, me ha concedido Portafolio, he defendido más de una vez a la operadora de telecomunicaciones, Claro Colombia, filial de la multinacional América Móvil, propiedad de uno de los hombres más ricos del mundo, Carlos Slim Helú. También los he criticado como he criticado a Tigo, filial del fondo de inversiones Millicom y a Movistar Colombia, filial de la multinacional española Telefónica y a estos últimos por “pechugones” y querer estar pegados a la teta de sus socios públicos. Y la he defendido en varias columnas con el mismo título de la cantaleta de Claro porque no creo en tal posición dominante que alegan sus competidores, en un país donde hay más de diez operadores de telecomunicaciones.
Pues bien, este analista e investigador del sector de las Telecomunicaciones y las TIC, considera que el rumor que esparcieron que el más probable beneficiado con las denuncias ante la Procuraduría al proceso licitatorio, abierto por el MINTIC por $ 400.000 millones de pesos y llamado, genéricamente, Escuelas PotencIA, sería Claro Colombia, es falso. Las comunicaciones de Claro subidas el SECOP, lo demuestran.
Todo el país sabe que Claro Colombia es el contratista del otro billón de pesos adjudicados, en el gobierno anterior, de la famosa licitación de Centros Digitales cuyo otro ganador inicial incurrió en indelicadezas que ya son de público conocimiento. Fui, inicialmente, un crítico de dicha licitación, pero terminé apoyándola porque me senté con funcionarios del ministerio y vi las bondades de un proyecto que le garantizaba, les garantiza, Internet a chicos de escuelas rurales de todo el país por 10 años.
La pregunta que nos hacemos y compartimos con todo el país es a quién le interesaba perjudicar un proceso licitatorio tan bien manejado que, a la hora de escribir esto, habían llegado al sitio de Colombia Compra Eficiente, nueve cartas de 14 proponentes habilitados, apoyando el proceso y pidiéndole al ministro Lizcano que no lo revocara, decisión tomada ante la insistencia de la Procuraduría.
Pues bien, entrando en detalle, respecto de la licitación, hay que decir que está muy bien planteada y que se presentaron 20 empresas y fueron habilitadas 14, lo cual demuestra pluralidad y transparencia. ¿Y entonces, cuál es el punto de discusión? El gobierno, el MINTIC, dividió la licitación en cuatro zonas y un proponente, dice la licitación, no se puede ganar más de dos zonas. Y lo que queda claro con las denuncias mencionadas es que buscan favorecer a un proponente que cree tener derecho a ganarse las cuatro zonas y después de tantos dimes y diretes, queda claro que hay, hubo, fuego político tratando de contaminar un proceso transparente. ¿Qué senador o alto consejero presidencial será?
Aparte de ese detalle, hay que mencionar que la licitación solo va a prestar servicios por dos años, buscando no comprometer vigencias futuras que tomen tiempo del gobierno entrante.
Por otro lado, vale resaltar que una de las preocupaciones anotadas en las observaciones a la licitación que le hicieron llegar a la Procuraduría tiene que ver con los puntos de acceso o Access Point (AP) y si bien es cierto, esta licitación mejora, sustancialmente, tanto el ancho de banda como los AP, no debería ser motivo de suspicacia ni de prevención porque además de mejorar las posibilidades para el país, la verdad, sea dicha, el costo del gigabyte satelital ha bajado bastante y su cobertura ha mejorado mucho porque ya hay varios gigantes en el mercado ofreciendo servicio. Verbigracia, Starlink, la empresa del famoso dueño de Tesla, SpaceX y Twitter. Al final del día, quienes van a ganar son los niños y niñas de las escuelas rurales beneficiadas porque van a contar con un Internet de una gran calidad.
¿Alguien podría ver algo turbio en la licitación de Centros Digitales por qué en esta licitación, la de Escuelas PotencIA, hay más AP y mejor ancho de banda? ¡Pamplinas!, ese contrato está firmado y ejecutado y los contratistas cumpliendo con su obligación de mantener la infraestructura y la calidad ofrecida. Miren cuánto ha bajado el costo del Internet satelital en los últimos cuatro años en el país y entenderán mi apreciación.
Es por todo lo anterior que me atrevo a escribir esto y a decirle a los ghost writers de las denuncias al proceso que Colombia necesita más procesos prístinos de contratación y menos politiquería y corrupción. A la procuradora que deje de estar actuando con prisma político y al ministro Lizcano, adelante, por el bien de todos los niños y niñas de la Otra Colombia.
Nicola Stornelli García
Analista e Investigador de Tendencias Digitales. Columnista de Portafolio y colaborador de El Tiempo, Razón Pública y de DPL News
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