Llamado a que los sectores productivos asuman una economía más sostenible

La discusión sobre el cambio climático y la pérdida de biodiversidad se ha consolidado como pilar clave en la agenda de las empresas colombianas. Las estrategias, inversiones, planes y transformaciones de las mismas deben, según expertos, apuntar a un futuro más amigable con el ambiente.

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En el marco del III Foro de sostenibilidad de Corficolombiana, su presidenta, Milena López, afirmó que las compañías desempeñan un papel crucial en la búsqueda de soluciones y oportunidades para construir un país más sostenible.

Esto teniendo en cuenta que, además de ser el segundo país más biodiverso del mundo, las responsabilidad de cuidado no solo depende de un ente gubernamental, sino también de la empresa, la industria y la comunidad.

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Para la directiva, las empresas tienen un papel protagónico, donde no solo se debe apostar por el crecimiento económico, sino que es una oportunidad para innovar y transformar los modelos de desarrollo, creando soluciones más sustentables. Destacó que “desde Corficolombiana se están haciendo inversiones responsables, conscientes y comprometidas”.

“Nuestras empresas están diseñando una serie de planes para los ecosistemas, con más de 92 zonas protegidas y 115 programas ambientales actualmente en marcha. En 2016, cerramos 225.000 árboles y en los últimos 5 años, esta cifra ya asciende a más de 250.000 árboles”, apuntó.

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Y es que justamente es el rol de las empresas el que juega un papel de importancia dentro de la dinámica sostenible. De acuerdo con Miki Edelman, senior managing director de Macquarie Group Capital, la educación en torno al cambio climático en los jóvenes se viene consolidando de importancia para la compañía.

Explicó que desde Macquarie se está “trayendo” más inversión a los mercados emergentes, así como también programas de educación en materia climática. “Nuestro propósito es empoderar a las personas (... ) Hay una oportunidad. Si reforestamos el 15% de las tierras degradadas, podemos prevenir el 60% de extinción de las especies", afirmó.

La presidenta presidenta de Corficolombiana también resaltó las oportunidades que se pueden encontrar dentro de los desafíos que impone la lucha contra el cambio climático. Entre las soluciones manifestó que es necesario hacer inversiones estratégicas en esta materia.

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Ahora bien, otro de los aspectos a destacar es el del papel de la banca. En este punto, María Lorena Gutiérrez, presidenta del Grupo Aval, recalcó el trabajo que tiene que hacer este sector respecto al financiamiento de las transiciones o el apoyo que necesitan los proyectos sociales, lo que deriva en gestionar recursos para abordar esas estrategias.

“Esto implica seguir creando soluciones innovadoras que ayuden en el crecimiento económico de la sociedad, como en servicios o productos que sirvan para el desarrollo de la biodiversidad. También se pueden implementar mecanismos de financiamiento para la transformación del ecosistema. La seguridad financiera estará expuesta a medir los proyectos derivados del cambio climático”, explicó.

Por esta razón, la directiva reiteró el mensaje sobre que los sectores son agentes de cambio para asumir una economía más sostenible en el país. “Entendemos el papel que tenemos en el financiamiento. Trabajaremos en las reducciones en energías de carbono, a través de productos financieros verdes", indicó.

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Desde otro punto de vista, los expertos señalaron la importancia de la COP16 que se celebra el próximo mes en Cali, Valle del Cauca. Al respecto, Rahul Arora, partner and Global Co Lead ESG & Sustainability Strategy de ERM, apuntó en temas como la biodiversidad y el cambio climático, la transformación es “más difícil”, por lo que según los datos post pandemia se estima que hay entre 2.000 y 3.000 empresas enfocadas en temas de la naturaleza.

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“Por esto la COP16 es una gran oportunidad para liderar e inspirar. Es necesario realizar alianzas porque este es un camino que no se puede recorrer solo (...) Las empresas se enfocan en el beneficio, situación que no está mal, pero es necesario que estas mismas compañías cuenten con estrategias para su futuro, para la sostenibilidad y para el cambio climático”, apuntó.

Por otra parte, María Lorena Gutiérrez, presidenta del Grupo Aval, se refirió a las ventajas de la COP16 en el país, señalando que es esencial utilizar los US$200.000 millones anuales para la biodiversidad que hay desde todas las comunidades disponibles, incluidos 30 millones de organismos de financiación internacional, se están destinando para ese fin.

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“Tenemos claro que el futuro económico está ligado al bienestar climático. Por eso, tenemos claro nuestro rol como agentes de cambio con soluciones financieras innovadoras y acciones concretas que promuevan la conservación de la biodiversidad y la alimentación sustentable”, indicó.

En el encuentro se subrayó igualmente que trabajar en línea con la naturaleza para avanzar en el desarrollo económico y social trae consigo diferentes estrategias empresariales para apoyar esta materia. Dicho lo anterior, Mauricio Millán, gerente de Covipacífico, destacó que desde el inicio de la construcción de la vía de 32 kilómetros se identificaron espacios con potencial de restauración.

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Entre los ejemplos, el directivo mencionó que uno de los proyectos en cuestión tiene que ver con dos intervenciones en el tramo de Titiribí. Esta es una estrategia cuenta con la restauración de 285 hectáreas, donde se han monitoreado inicialmente 130 especies de aves.

Así mismo, Juan Fernando Patiño, líder del programa Conexión Jaguar de ISA, destacó que desde la compañía se está buscando apoyar iniciativas de conservación y restauración de hábitats del jaguar, recuperar ecosistemas boscosos, donde se perdió ya esa conectividad en áreas degradadas y conservar aquellos bosques que todavía existen y están amenazados.

Entre los resultados, rescató que el programa ha hecho más de 10 alianzas con la sociedad civil, ONGs, comunidades, academia y emprendedores, donde hay un potencial de reducción de más de 4,5 millones de emisiones de CO2.

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En materia agropecuaria, Francisco Bejarano, presidente Pajonales, analizó que uno de los desafíos más grandes que tiene el mundo es el cambio climático, porque afecta al sector agroindustrial, además de que amenaza la seguridad alimentaria.

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“En el mundo más o menos 763 millones de personas sufren de hambre. Ese es el 9,2% de la población total. Pero si miramos a Colombia, son 14 millones de colombianos que están afectados, de los 50 millones de habitantes que tiene el país”, destacó.

Bejarano explicó que el clima viene afectando el desarrollo y la productividad del campo constantemente, teniendo en cuenta que se están viviendo épocas de sequía prolongadas, al tiempo que se marcan en otras zonas fuertes lluvias.

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Por esta razón, desde Pajonales se están implementando estrategias en el establecimiento de la huella de carbono y en el desarrollo de planes frente al uso del recurso hídrico. Respecto a esto, aseguró que se han hecho inversiones por cerca de US$2 millones a US$3 millones en agricultura de precisión y el manejo de las fuentes hídricas.

* Las sociedades Corficolombiana y Grupo Aval hacen parte del grupo empresarial que controla a la sociedad Casa Editorial EL TIEMPO, a la cual pertenece Portafolio.