Bancolombia anunció que fortalecerá su línea de crédito sostenible para la economía circular, con lo cual este año pondrá aproximadamente $600.000 millones a disposición de iniciativas que tengan esa vocación.
(Lea: Cómo la IA y el internet de las cosas pueden impulsar la búsqueda de fuentes renovables).
Según la entidad, durante el 2023 acompañó a más de 400 proyectos con desembolsos por $540.000 millones bajo esta línea, los cuales se destinaron al aprovechamiento y uso de nuevos materiales, circularidad en procesos y materiales, modelos de arrendamiento operativo de maquinaria y reducción en los consumos de agua y energía.
Estas iniciativas lograron evitar residuos por más de 145.000 toneladas (equivalentes a lo que genera una ciudad como Bogotá en 20 días), al tiempo que se aprovecharon más de 385.000 toneladas de residuos.
(Vea: Radiografía de la economía circular: ¿cómo está Colombia?).
La economía circular es una estrategia basada en tres principios: eliminar recursos y contaminación, hacer circular productos y materiales y regenerar la naturaleza, con lo cual es una oportunidad para que empresas y sector financiero puedan contribuir a enfrentar el cambio climático, la contaminación por plásticos y la pérdida de biodiversidad con iniciativas que además se traducen en desarrollo económico.
Bancolombia.
Archivo EL TIEMPO
En ese sentido, la línea de crédito sostenible para la economía circular de Bancolombia ofrece ventajas como una reducción de tasa de hasta 100 puntos básicos, plazos ajustados al tipo de proyecto o activo a financiar, periodos de gracia de hasta dos años; y está orientada proyectos con las siguientes características:
• Suministros circulares: Aprovechamiento de residuos para producción de materia primas con recursos renovables, reciclables o biodegradables.
• Recuperación de recursos: Proyectos encaminados a la reparación, remanufactura, renovación o reciclaje de residuos.
• Extensión de la vida útil: Proyectos para implementar cambios en el producto o en el proceso productivo, orientados a extender la vida útil del producto, para que sea reutilizable, reparable, remanufacturable y/o facilite su reciclaje o aprovechamiento.
• Producto como servicio: Modelos para el uso compartido de activos o el uso del activo para tener un servicio.
• Plataforma de tecnología: Proyectos de tecnología y data para habilitar y facilitar sistemas circulares.
• Proyectos para infraestructura de suministro y tratamiento de agua: Sistemas de acueducto, sistemas de alcantarillado sanitario y combinados, sistemas de tratamiento de aguas residuales e Inversiones para el uso eficiente del agua. Recirculación de aguas lluvias para consumos internos.
(También: Cadenas productivas, un modelo para impulsar la economía circular).
En todos los casos, el proyecto deberá cuantificar cuál es el beneficio que le genera al medio ambiente en términos de residuos aprovechados o evitados, agua recirculada, agua de fuentes alternativas, reducción de los consumos, entre otros.
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