La mayoría de las religiones cuentan con una Biblia o libro con sagradas escrituras que definen un dogma y definen una relación entre Dios y la humanidad. Es una realidad que las religiones invitan a que las personas deben ser humildes, amar al prójimo y a respetar a Dios. Pero, ¿qué sucede con la riqueza material o con aquellos que son adinerados y ricos?
El padre Enrique Granados escribió un artículo en el sitio Catholic Link, donde se recopilan materiales y recursos para aquellos que quieren acercarse a la fe católica y sentenció que "ser rico no es un problema en sí mismo".
"El problema está en la actitud con que enfrentamos esta realidad, en lo que hacemos con ella. Por lo tanto, una persona no se condena o se salva por ser rica o pobre, sino por amar a Dios y al prójimo, como Jesús nos enseñó en el Evangelio", explicó.
En esta línea, remarcó que el valor de la caridad es "el criterio clave". "El mismo Jesús nos ha dicho que sobre eso seremos evaluados al final de nuestros días. Es interesante que Jesús hable directamente sobre este tema con mucha claridad, justamente después del episodio del encuentro que tiene con el joven rico", resaltó en su texto.
Y destacó un versículo de la Biblia: "'Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros. Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes (Jn. 13,14)'. Esto nos enseña que el hombre rico tiene una gran responsabilidad de vivir una vida de gratitud que se manifieste en un amor generoso"
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Ser rico 'es una responsabilidad' y 'hay un deber' a cumplir
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En otro apartado, el sacerdote de origen peruano habló sobre las responsabilidades de gozar de bienes materiales, como dinero, territorios y otros objetos. De esta manera, reflexionó que hay "un deber" con aquellos "que sufren".
"Jesús deja claro que hay una responsabilidad y un deber con los que sufren, y si tengo posibilidades económicas para ayudarlos, mi responsabilidad será mayor. Dios me preguntará sobre ello en el momento final de mi vida", indicó el padre Granados.
Y agregó: "Otro riesgo frente a las riquezas, es que creamos que con ellas lo tendremos todo, corramos locamente tras el dinero, y cuando tengamos todo eso nos demos cuenta que en esa carrera loca, perdimos cosas muy importantes. Amistades, amores profundos, familia, valores, integridad, fe, etc".
Por último, insistió que una persona puede tener todo el dinero o los recursos materiales del mundo, pero a veces no logra lo más importante y que no se consigue a través de transacciones. "No se puede comprar el amor, la amistad y la familia", completó.
4 consejos para aquellos que son ricos
El padre Enrique Granados tambien bridó 4 consejos para los hombres y mujeres que viven en abundancia. "Son para seguir creciendo en su vida de fe, ser luz para otros como nos pide Jesús y alcanzar la santidad", precisó.
1. No olvidar que esta vida es pasajera.
2. No olvidarse de los pobres.
3. Saber discernir.
4. Tener presente que uno es ejemplo para sus hijos.
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