La transformación digital es hoy un aspecto omnipresente en el mundo empresarial. Este término hace referencia al aprovechamiento de las herramientas tecnológicas disponibles, buscando mejorar en eficiencia, eficacia, rentabilidad, calidad y experiencia del cliente. Sin embargo, esta transformación es solo una parte de un proceso más amplio de adaptación que las organizaciones han enfrentado históricamente ante un entorno cambiante.
La transformación digital es hoy un aspecto omnipresente en el mundo empresarial. Este término hace referencia al aprovechamiento de las herramientas tecnológicas disponibles, buscando mejorar en eficiencia, eficacia, rentabilidad, calidad y experiencia del cliente. Sin embargo, esta transformación es solo una parte de un proceso más amplio de adaptación que las organizaciones han enfrentado históricamente ante un entorno cambiante.
Las condiciones macroeconómicas y geopolíticas actuales, tanto a nivel nacional como global, requieren que los directivos prioricen una agenda compleja para guiar a sus organizaciones a través de las dificultades. “A lo largo de la historia, las empresas han superado depresiones económicas, guerras, crisis financieras y pandemias. La clave ha sido siempre su capacidad para adaptarse, transformando sus formas de operar, ofrecer servicios, productos y rediseñar sus modelos de negocio y procesos”, afirma José Libardo Bueno, socio líder de Mercados de EY Colombia.
En este contexto, la transformación digital debe ser vista como una herramienta estratégica para enfrentar las condiciones actuales. No es la primera vez que la humanidad enfrenta grandes retos y no será la última. Las organizaciones necesitan ser ágiles y flexibles para cambiar y adaptarse continuamente.
De acuerdo con el experto, los directivos deben centrarse en varios temas cruciales para la supervivencia y el éxito de sus empresas. Entre estos están la gestión de la caja y del capital de trabajo, esenciales para proteger los recursos financieros y reducir la exposición a riesgos de liquidez; también la gestión de la información y la analítica de datos son vitales para descubrir nuevas oportunidades de negocio y mejorar los servicios.
Otro punto clave es la gestión del talento en todas sus etapas: atracción, desarrollo y retención; así como, la optimización de la gestión tributaria y legal para asegurar que la empresa navegue eficientemente en el panorama regulatorio. Finalmente, la gestión de la sostenibilidad y el impacto social no solo es una responsabilidad ética, sino también una necesidad para la viabilidad a largo plazo.
Un estudio reciente realizado por EY y la Universidad de Oxford destaca que los programas de transformación a menudo enfrentan momentos críticos o de inflexión, y resalta que los líderes que colocan a las personas en el centro de estos procesos tienen 12 veces más probabilidades de mejorar significativamente el rendimiento de sus transformaciones.
“Los puntos de inflexión se originan cuando una sensación de progreso se convierte en estancamiento, lo cual, si no se maneja adecuadamente, puede afectar negativamente la motivación y disposición de los empleados”, explica Bueno.
El estudio de EY, que encuestó a 846 líderes senior y 840 empleados en empresas de más de 1.000 millones de dólares en ingresos anuales en 16 sectores industriales y 23 países, utilizó modelos predictivos para identificar tres pasos cruciales para mejorar el rendimiento de la transformación: detección de desafíos, creación de sentido y actuación.
Destacado:
Los programas de transformación exitosos están diseñados para detectar y navegar rápidamente por los puntos de inflexión.
Para alcanzar el logro de los objetivos de un proceso de transformación es crucial crear un ambiente donde tanto líderes como empleados puedan prosperar. Los seis impulsores identificados por el estudio incluyen: inspirar con una visión con propósito; liderar con adaptabilidad y enfoque en el equipo; cuidar la seguridad psicológica de los empleados; construir utilizando la tecnología para realizar la visión; empoderar promoviendo la libertad disciplinada; y colaborar para encontrar las mejores soluciones colectivamente.
“Los programas de transformación exitosos están diseñados para detectar y navegar rápidamente por los puntos de inflexión. A través de nuestra investigación, hemos descubierto que esto ofrece múltiples beneficios, incluida la aceleración del impulso, la superación de las medidas de resultados, el desarrollo de capacidades y la preparación de la organización para futuras transformaciones. Por el contrario, los puntos de inflexión fallidos pueden empeorar la situación general”, agrega Bueno
Para convertir un punto de inflexión en una oportunidad, los líderes deben anticiparse a los desafíos, escuchar a su organización, facilitar el flujo de comunicación, moldear el entorno para el éxito de las personas y cocrear soluciones. “En el corazón de una transformación exitosa están las personas que trabajan juntas para hacer algo que no se ha hecho antes”, apunta.
La transformación eficaz es un proceso que se planea con el fin de estar preparados para anticipar y aceptar los puntos de inflexión. Esto requiere un sistema de alerta temprana que utilice indicadores clave de comportamiento (KBI) para comprender casi en tiempo real el estado emocional de las personas involucradas.
De otra parte, los líderes deben estar física y emocionalmente presentes, pasando tiempo con el equipo en la primera línea de la transformación y con aquellos afectados por el programa. Es crucial que se comprometan de manera proactiva, escuchando lo que se dice y lo que no.
“Inconscientemente, muchos líderes suprimen el libre flujo de comunicación sobre desafíos o problemas. Los líderes presentes, emocional y físicamente, deben saber escuchar lo que se dice y lo que no se dice, reconociendo que están al servicio de los mandos intermedios y de la fuerza laboral que buscan alcanzar la visión de transformación”, comenta el experto.
La transformación digital es solo un componente dentro de una agenda más amplia que los directivos deben priorizar. La tecnología es crucial, pero debe estar alineada con la mejora específica del negocio y la gestión de ciberseguridad. El enfoque en el factor humano y una planificación adaptativa son esenciales para una transformación exitosa y sostenible.
