El resurgir del mercado inmobiliario de Valle del Cauca se puede ver en las cifras de empleo que maneja el sector: con corte a septiembre, la actividad inmobiliaria empleó a más de 225.000 personas. Es decir, se recuperaron más de 80.000 empleos en actividades inmobiliarias en la región respecto al mismo periodo de 2021, explica Santiago Racines, gerente de Century 21 Racines.
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En cuanto a los tiempos de colocación promedio para arriendo, en los estratos 5 y 6 han crecido (están entre 130 y 150 días), mientras que en el estrato 4 descendió a 80 días. En venta, en los estratos 4 y 5 se han mantenido, mientras que en el 6 ha decrecido ligeramente.
En el Valle del Cauca, el valor promedio de venta ronda los $220 millones y de arrendamiento, alrededor de $1,2 millones. “Son precios estables”, afirma Racines, quien destaca que la mayoría de las operaciones son de alquiler. “Existe una gran necesidad de unidades en alquiler y eso es una gran oportunidad para constructores y desarrolladores”, agrega.
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“Tenemos un gran potencial de crecimiento ya que alrededor del 42 % de la población vive en arriendo y mucha gente quiere ser propietaria, de modo que hay una gran oportunidad de crecimiento en ventas”.
Los aspectos que hacen tan atractiva esta región para los constructores y desarrolladores son su alta valorización, alta rentabilidad, facilidad en créditos y permisos y, por supuesto, el crecimiento del turismo y las actividades de entretenimiento.
En términos de infraestructura y logística, es la tercera región más importante, gracias a su desarrollo vial y la importancia del puerto de Buenaventura.
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