Con la expedición del Decreto 0977 del 2 de agosto de 2024, el Gobierno, en cabeza del Ministerio de Minas y Energía, reglamentó la implementación de los Distritos Mineros Especiales para la Diversificación Productiva. Una estrategia que tiene como objetivo organizar y planificar la minería, así como presentar alternativas económicas complementarias a las comunidades que dependen en gran medida de este tipo de actividad.
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De acuerdo con la viceministra de Minas, Johana Rocha, este instrumento, que hace parte del Plan Nacional de Desarrollo (PND), está enfocada en "articular tanto la oferta para la expresión de la minería, formal o informal, como la oferta de otros sectores para garantizar territorios diversificados en sus matrices económicas y productivas".
Entre otros de los propósitos que tiene esta política se incluyen impulsar las actividades complementarias y alternativas a la minería; mejorar las condiciones de acceso a servicios financieros; explorar opciones de industrialización y reconversión, y promover la implementación de energías renovables en territorios con alta actividad minera.
Así mismo, la identificación de estas zonas tiene en miras gestionar los conflictos socioambientales, ofrecer otros caminos para quienes dependen de la economía del carbón y promover la formalización en este sector.
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¿Dónde están ubicados?
En rueda de prensa, la viceministra Rocha dio a conocer cuáles serán los primeros territorios priorizados como distritos mineros. En total son 16, seis para la transición energética y la reindustrialización, y 10 para la vida y la paz.
Los distritos con enfoque hacia la transición se encuentran en el Cesar, en el llamado 'Corredor para la vida'; La Guajira, en Barrancas, Hatonuevo y Maicao, y en los límites entre Cundinamarca y Boyacá, en la zona que agrupa Ráquira, Samacá, Guachetá, Lenguazaque, Cucunubá, Sutatausa y Tausa. A estos se suman otros tres ubicados también en Boyacá (Norte, Valderrama - Norte y Sugamuxi - Tundama).
Por su parte, las zonas para la vida y la paz están distribuidas de la siguiente manera: tres en Nariño, dos en el Cauca, dos en el Chocó, una en Antioquia, una en Valle del Cauca y otra en el Caldas. Cabe destacar que los distritos que agrupan esta categoría son territorios en los que se ha detectado una alta presencia de actividad minera informal.
Rocha destacó que las zonas que se han identificado están en un proceso de diversificación de sus subsectores de la minería para transitar hacia minerales que sean estratégicos para las necesidades de la transición energética y otras actividades productivas.
"Estos son los distritos en donde hemos podido empezar procesos, no solamente de caracterización y de diagnóstico, sino de diálogo territorial y articulación con otras autoridades para que efectivamente podamos llegar a la conclusión que hoy tenemos de que esas zonas definitivamente pueden beneficiarse con este esquema de trabajo", agregó.
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