La limpieza y desinfección son procesos comunes y necesarios para evitar la propagación de virus y bacterias. Sin embargo, hay objetos de uso diario que suelen escaparse del radar y que son 'entornos perfectos' para el crecimiento de hongos y microorganismos.
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De hecho, incluir dentro de esa rutina de aseo los artículos de alto contacto, además de evitar que se conviertan en riesgos para la salud de quienes los emplean, contribuyen a mantener sus buenas condiciones e incrementar su vida útil.
Le contamos cuáles son esos objetos y lugares que suelen pasar desapercibidos y que deben limpiarse con más frecuencia.
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Al hacer la limpieza de un espacio, es importante tener presentes aquellos puntos con los que se tiene contacto constante como, por ejemplo, los pomos de las puertas, los cajones, las ventanas, armarios o interruptores.
En este caso, se recomienda limpiar cualquier resto de grasa o mugre con agua y jabón, así como emplear un desinfectante para eliminar gérmenes de la superficie.
Pomo de la puerta
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Posiblemente, este es uno de los objetos que más expuesto está a las bacterias y que más contacto tiene con las manos tanto dentro como fuera del hogar, lo que lo hace propenso a la suciedad.
Para evitar la acumulación de gérmenes, se aconseja frotarlas con agua templada y jabón o con limpieza al vapor.
Llaves
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Varios estudios advierten que el teclado de un computador o la pantalla de un celular pueden llegar a tener hasta 30 veces más microorganismos que la tapa de un inodoro. Esto se debe a que este tipo de objetos se manipulan de manera constante.
En lo que se refiere a los teléfonos móviles, para limpiarlos correctamente sin correr el riesgo de causar daños por agua es preferible seguir las recomendaciones e instrucciones de la marca.
Celular
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(Vea: Almohadas, ¿un ‘nido’ con más bacterias que un inodoro?)
Ya sea para corregir problemas de visión o para protegerse de los rayos del sol, las gafas son un accesorio esencial que requieren de un cuidado especial para garantizar su buen estado y la propagación de bacterias que puedan afectar la visión.
Para mantenerlas sin grasa, polvo o residuos se pueden enjuagar con agua tibia, además de usar un paño de microfibra suave y limpio.
Gafas
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Los toxicólogos recomiendan limpiar y desinfectar estos objetos al menos cada 15 días con agua y con jabón. En caso de que se compartan con otras personas, los juguetes deben lavarse semanalmente.
Si el artículo está visiblemente sucio, se sugiere desinfectarlo de forma inmediata para evitar transmitir enfermedades infectocontagiosas.
Juguetes
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PORTAFOLIO
