Revisando los datos de crecimiento económico de Colombia desde 1991 la sorpresa fue grande. Inicialmente una pequeña decepción y después un asombro enorme.
En “Colombia No es Ta’ Mal”, proyecto que estamos desarrollando en Raddar, buscando entender el impacto de la Constitución de 1991 en el desarrollo de Colombia, como mostré en la columna pasada, donde es claro que la reducción de pobreza es impresionante.
Esto me llevo a mirar los indicadores más obvios de la económica y quede un poco decepcionado; después de revisar los datos de cuentas nacionales de las Naciones Unidad, el crecimiento real del PIB de Colombia entre 1990 y 2022 fue de 193,3%, ocupando el puesto 84 de 208 países, frente a un crecimiento promedio de 224% de estas naciones. Es decir, somos un país que no creció más que el promedio mundial.
Aunque crecimos más que toda América (175,9%) y que Latinoamérica (184,9%), lo que es una buena noticia, nos pone lejos de los países de Asia (318%).
La ver los datos de consumo de hogares, cosa que tiene especial interés para mí y para Raddar, las cosas no son muy diferentes: Mundo (229%), América (182%), Asia (304%), Latinoamérica (191%) y Colombia (191%), dato que me sorprendió, porque esperaba más alto.
Esto nos pasa a los investigadores: planteamos una hipótesis y los datos la validan o no. Pensé que nuestro PIB había crecido mucho más que el mundo y que Latinoamérica, pero no, y más aún el consumo de hogares. Si bien frente a la región el avance es mucho mejor, frente al mundo, Asia nos lleva la delantera.
La sorpresa estuvo al ver el gasto público, donde los países en el mundo aumentaron este rubro en promedio 263%, América 212%, Asia 395%, Latinoamérica 228% y Colombia 537,5% con la posición 20 entre 208 países y sólo superado por Guyana en la región. Extraordinario. El dato es impresionante: multiplicamos por más 5 veces el valor real de la cuenta del gasto público del PIB, lo que deja ver como el Estado ha financiado cada día más a muchos colombianos, pasando en 1990 a ser el 7,35% del PIB, a ser el 15,97% en 2022 y creciendo el gasto público por persona en 300,62%.
El gasto público es fundamental en un país ya que se refiere a salud, educación, seguridad, justicia y otros rubros que no son pagados directamente por los hogares sino por el estado, redistribuyendo los impuestos y mejorando la calidad de vida de las personas y haciendo que deban pagar menos de su bolsillo en esto. Claro, al hablar de 32 años, muchas personas (sobre todo los jóvenes) no han visto este cambio, porque han estado en el proceso y seguramente consideran que las cosas no han mejorado, desconociendo este enorme logro del país y de la Constitución de 1991.
CAMILO HERRERA MORA
Fundador de Raddar
